_
_
_
_
Crónica
Texto informativo con interpretación

Juega Saviola

El pibito, que ha despuntado cuando más se le necesitaba, está ante su gran ocasión tras la 'caída' de Rivaldo y es la mayor esperanza azulgrana

'¡Saviola, Savioola, Saviooola!'. El Camp Nou imitó por unos segundos al Monumental, el estadio de River Plate, y con el pañuelo en la mano aclamó por primera vez al pibito tras su golazo ante el Alavés (3-2). La afición despidió así su último partido en casa y hoy volverá a depositar su fe en este joven pequeño y escurridizo, callado y prudente fuera del campo, pero que en el área no cesa de incordiar con ese instinto cazador que le valió que el Mono Burgos le apodara el conejo. Descosido otra vez Rivaldo, caído irremediablemente el crack, Saviola ha despuntado en el momento oportuno. Justo cuando más se le necesita. Posiblemente, más la garra de Luis Enrique, es la gran esperanza del Barça.

'Saviola es un crack; es el crack del futuro', dice Xavi, su compañero de habitación
Más información
Saviola arregla un mal partido
Saviola emociona al Camp Nou
Saviola opta por la nacionalidad italiana para ser comunitario

'A ver si se nos enchufa Rivaldo', suspiró un jugador azulgrana justo antes de viajar a Vigo donde el Barça perdió el partido y al brasileño. Y no dudó después cuando se le preguntó por el argentino: '¿El pibito? Ese lleva enchufado todo el año. Ha jugado poco pero ha metido 15 goles. Y en condiciones normales garantiza 25. Es tan listo como Raúl, aunque quizá mejor que él en el uno contra uno'. No debió verlo tan claro el técnico Carles Rexach quien durante medio año obligó a Saviola a hacer viajes de ida (siempre fijo en el Camp Nou) y vuelta (siempre suplente fuera). Charly tiene razón en algo: Saviola ha jugado tanto en la Liga (2.243 minutos, 15 goles) como el que más (2.488, Kluivert, 16). Pero los números del argentino caen en picado en la Liga de Campeones (4 goles) donde no ha actuado ni la mitad del tiempo posible. En Europa ha sido hasta ahora solo un turista: no jugó en Lyon, ni en Liverpool, ni en Roma, ni en Estambul, ni en Atenas. Nadie lo imagina hoy suplente. Y hasta cuesta imaginar, sin que rabie la afición, encantada con el ángel del argentino, que repita suplencia en el Bernabéu (en la Liga estuvo solo 13 minutos en el césped). Tiene algo a su favor: fue él quien marcó el gol definitivo ante el Panathinaikos que confirmó el pase a las semifinales. El gol para que nadie le discutiera como titular fijo.

'No se le ve reír casi nunca', dice un miembro del fútbol-base del club. No será para tanto pero lo cierto es que, pese a que solo tiene 20 años, su historial se ilumina en los días grandes. Acostumbrado a pelear con un físico tan frágil, Saviola ha tenido que compensar esa carencia con una concentración extrema. 'Estos clásicos no se juegan todos los días. Uno tiene en la mente que sobre la cancha estarán varios de los mejores futbolistas del mundo. Yo intentaré darlo todo', afirmó el domingo a COM Ràdio, consciente de que es una ocasión que no se ve desde hace 40 años. No le fue mal, como explica Albert Masnou, en el libro Un pequeño gigante, que acaba de salir a la calle, en sus citas claves: debutó con 16 años en el River con un gol; marcó dos el día que ganó su primer título (el Apertura 99); otro en la final del Mundial sub-20 y se estrenó como azulgrana con otros dos. Hace poco saldó ciertas cuentas: marcó ante los griegos, goleó por primera vez en la Liga en campo ajeno (dos en San Mamés) y acabó aclamado en casa. La lesión de Rivaldo ha reforzado su protagonismo. Este partido hace historias -¿cuántas veces se ha reproducido el celéberrimo gol de Evaristo?- y sabe que toda Europa se colocará ante el televisor y que Argentina está pendiente de él. Quizá el jugador adivine que se trata de su última ocasión para que Bielsa le incluya en la lista (ya le citó para el útimo amistoso en Alemania) para el Mundial.

Posiblemente, hoy eche en falta a alguien. Xavi, el mediocentro, con el que pidió desde el primer día compartir habitación, con quien pasa las horas buscando canales de fútbol, está sancionado y no le podrá regalar sus asistencias. Cuatro de sus últimos cinco goles nacieron de las botas del centrocampista. 'Bueno', relativizó Xavi. 'Él se mueve entre líneas y se desmarca muy bien. Pero también he dado muchos pases a Rivaldo y Kluivert. Y el último gol ante el Alavés lo hizo casi todo él. Yo le veo muy metido en esta semifinal'. 'Tanto Xavi como Rivaldo y Puyol son jugadores fundamentales. Pero hay compañeros que podrán sustituirles', dijo Saviola, siempre disciplinado.

El pibito, que utiliza la taquilla que ocupó Maradona, ha ido dando pasos pequeños pero de una firmeza aplastante: tenía al público en el bolsillo antes de pisar Barcelona pero luego, paso a paso, se ha ganado el cariño y el respeto del respeto del vestuario. '¿Que qué me parece? ¡Es un crack! Es el crack del futuro. Sólo hay que ver cómo se ha integrado y lo bien que lo está haciendo', afirmó Xavi, que casi se confesó fan del argentino. 'Es un chico muy humilde, listo, que se fija en todo lo que pasa en el club para mejorar su rendimiento', añadió Luis Enrique. 'Es muy bueno en el uno contra uno. Y dice mucho a favor de él lo bien que ha encajado sus suplencias'. La revista Newsweek le eligió este año como uno de los siete personajes del futuro y hace ocho días el mismo Cruyff, tan visionario como poco amigo de las contemplaciones, dijo: 'Por su talento y su carácter Saviola tiene madera de mito. Pero acaba de empezar y hay que esperar quince años para ver si lo logra'.

Xavi, a la izquierda, y Saviola, durante un entrenamiento del Barça.
Xavi, a la izquierda, y Saviola, durante un entrenamiento del Barça.VICENS GIMÉNEZ

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_