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El incendio que empezó el viernes en Àreu sigue fuera de control

Los Bomberos de la Generalitat calculan que tardarán otros dos días como mínimo en controlar totalmente el incendio forestal que desde el pasado viernes ha arrasado una superficie de más de 100 hectáreas de pinos y de abetos centenarios en la localidad de Àreu (Pallars Sobirà). El fuerte viento del norte que sopla en la zona y lo escarpado del terreno se han convertido en los principales enemigos de los equipos que combaten el fuego.

Un total de 25 dotaciones de bomberos, con medios terrestres y aéreos, y decenas de voluntarios trabajaron ayer en la extinción del incendio, que continúa descontrolado. Desde primera hora de la mañana, la tarea de los bomberos se centró en abrir zanjas de forma manual en los puntos más conflictivos del incendio para impedir que el frente del fuego avance hacia otras partes del bosque. Mientras tanto, los helicópteros bombarderos lanzaban agua sobre la zona humeante.

La sequedad del terreno y las dificultades para llegar hasta el fuego, localizado en una ladera con una fuerte pendiente, complica mucho las tareas de extinción. El alcalde pedáneo de Àreu, Sebastià Feliu, declaró ayer que el viento puede reavivar el incendio en cualquier momento, como ocurrió el pasado domingo cuando ya se había dado por apagado. El bosque quemado, que había sido incluido por la Generalitat en el futuro Parque Natural de l'Alt Pirineu, se encuentra en la misma ladera que el pueblo y hacía la función de barrera natural en caso de fuertes lluvias o de aludes de nieve.

Fernando B., el vecino de Àreu que provocó involuntariamente el incendio mientras quemaba los zarzales de un ribazo, declaró ayer en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Sort. De acuerdo con su versión, el viernes prendió fuego a la maleza como suele hacer todos los años por esta época, pero debido al viento y a la sequía no pudo impedir que las llamas se descontrolaran y prendieran en cuestión de segundos en la masa forestal. 'Inmediatamente avisé al guardabosques y cuando llegaron los bomberos ofrecí mi colaboración', explicó el vecino, que podría ser sancionado con una fuerte multa por negligencia.

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