La Consejería vasca de Interior cree que ETA ha reconstruido una parte del 'complejo Donosti'
La Ertzaintza está persuadida de que la organización terrorista ETA ha vuelto a colocar un comando de pistoleros en el territorio de Guipúzcoa con algún tipo de red de colaboradores. Lo que aún no pueden precisar los investigadores es si sus integrantes son las dos personas identificadas por la policía vasca como presuntas responsables del asesinato de dos ertzainas en Beasain (Guipúzcoa) el pasado 23 de noviembre: Imanol Miner Villanueva, de 25 años, y Ainhoa García Montero, de 26 años, ambos naturales del municipio guipuzcoano de Hernani. Éste era hasta ayer el ultimo asesinato cometido por ETA en Guipúzcoa.
Lo que sí parece claro, en función de los pocos datos que tiene la policía, es que el nuevo comando de pistoleros ha utilizado la información que en su momento recopiló sobre Juan Priede el comando Buruntza de ETA, desarticulado por la Ertzaintza en agosto pasado.
Asesinato inminente
Uno de los detenidos en aquella operación aseguró entonces en los interrogatorios policiales que su grupo tenía previsto asesinar de manera inminente al edil socialista de Orio. En esta localidad guipuzcoana el único concejal socialista era Priede, que ayer caía abatido por las balas nueve milímetros parabellum. La operación de verano de la Ertzaintza evitó aquel atentado y otros que el grupo tenía previsto realizar contra representantes del PP, entre ellos la edil donostiarra María José Usandizaga.
La policía, según confirmó Interior, no tenía ayer ningún dato fiable sobre alguna posible identificación de los pistoleros. El hecho de que los asesinos robaran el coche horas antes del atentado en Lasarte y después lo abandonaran en Andoain -localidades relativamente próximas entre sí- sin colocar ningún tipo de explosivo para borrar posibles huellas de su interior, puede inducir a pensar que los etarras tienen el piso de seguridad en torno a alguna de las localidades (entre ellas Hernani o la más lejana Renteria) del habitual triángulo por el que se han movido históricamente los terroristas del complejo Donosti.
La Ertzaintza desarticuló el núcleo duro del complejo Donosti en agosto, detuvo a ocho etarras (todos ellos vivían en Zizurkil, situado muy próximo a Andoain) y halló entre otro material 160 kilogramos de la dinamita robada por la banda en Francia y el taller donde los etarras preparaban las bombas con los novedosos sistemas electrónicos. La policía les atribuyó nueve asesinatos. Para entonces, la Guardia Civil, la Policía y la Ertzaintza habían desarticulado, a lo largo de 2001, otros seis grupos del complejo Donosti.
La última operación contra ETA en esa provincia se remonta al 17 de octubre pasado, cuando el Cuerpo Nacional de Policía detuvo en Soraluze a los dos presuntos liberados (a sueldo), Roberto Lebrero y Luis Mariñelarena, y a cinco presuntos colaboradores del comando Aranba.
