El Gobierno incentivará el empleo con el pago de parte del subsidio

El Ministerio de Economía prepara una reforma del sistema de prestaciones por desempleo para que los mayores de 45 años acepten una oferta de empleo, aunque sea mal remunerado. Se mantendrá parte de la prestación por desempleo por un tiempo limitado, de manera que resulte algo más ventajoso aceptar el empleo que permanecer en paro. También se eximirá de cotizar a la Seguridad Social durante dos años a las mujeres que han sido madres.

El análisis que hace el Ministerio de Economía es que el problema del paro en España afecta sobre todo a colectivos concretos y a zonas determinadas. Los mayores de 45 años con baja formación y las mujeres entre 30 y 40 años son los grupos con más dificultades. La precariedad de los empleos que se les ofrece y la baja remuneración hace que les compense más agotar la prestación por desempleo que incorporarse al mercado laboral.

Éste es un problema antiguo, está prácticamente en todos los diagnósticos y es bastante común en todos los países de la UE. El Ministerio de Economía lo ha llevado a la cumbre de Barcelona y de ahí ha obtenido el respaldo para un nuevo enfoque, menos social y más económico. Le han puesto la música y ahora cada uno ha de escribir la letra.

La idea del equipo del vicepresidente Rodrigo Rato es mantener parte de la prestación por desempleo a mayores de 45 años que acepten un empleo. En este colectivo están, por lo general, parados con baja formación que suelen agotar la prestación por desempleo antes de aceptar una oferta mal remunerada.

En estas edades, el número de parados no es alto (unos 300.000), pero aquellos que tienen seguro de paro están una media de 12 o 13 meses cobrándolo hasta incorporarse a un puesto de trabajo. En edadades más bajas, aunque hay más parados (cerca de dos millones), se tarda menos (unos tres meses) en encontrar un empleo y, por tanto, se cobra el seguro durante menos tiempo.

El cobro de parte de la prestación se mantendría hasta el final del periodo en que se tiene derecho a ella (dos años como máximo). Esa cantidad, sumada al sueldo, sería más rentable que seguir cobrando la prestación. No se trata de una medida coercitiva, según fuentes de Economía, sino incentivadora. Es decir, quien no quiera entrar en este sistema mixto, seguirá cobrando el paro hasta agotarlo.

La fórmula para percibir esa ayuda está a estudio. Se podría mantener el cobro a través del Instituto Nacional de Empleo (Inem) o mediante el sistema de crédito fiscal en el nuevo impuesto sobre la renta. Este último método se aplica en Francia y Gran Bretaña.

Las mujeres entre 30 y 40 años es otro de los colectivos que el Ministerio de Economía cree que necesita incentivos para incorporarse al mercado de trabajo. Aquí el problema está, sobre todo, en que las empresas no quieren contratar a mujeres en edad fértil o las despiden cuando son madres. La medida a estudio consiste en eximir de las cotizaciones a la Seguridad Social durante dos años a las mujeres que han sido madres (ahora un año).

Fuentes del Ministerio de Economía señalan que estas propuestas se plantearán a empresarios y sindicatos en los próximos días, pero no exactamente con la idea de negociar. Se trata de medidas que tienen un coste bajo, según los cálculos de Economía, y 'a las que nadie se puede oponer', añaden las mismas fuentes. El vicepresidente Rato dijo ayer que 'no se trata de recortes presupuestarios, sino todo lo contrario'. Lo que se persigue es 'hacer la búsqueda del empleo más atractiva y más rentable para el trabajador'.