El Rayo hace líder al Madrid

El mismo Valencia que tan bien había soportado la presión en las ultimas jornadas sucumbió frente al colista; pero, eso sí, en Vallecas, un laberinto en el que ya se perdieron el Depor y el Barça. Un resbalón que devolvió la cabeza al Madrid en plena resaca del gran clásico.

Un partido que dejó un tufillo decepcionante para los blancos y pésimo para el peor Barça en muchos, muchos años. Los madridistas carecieron de instinto asesino para sepultar a los azulgrana, un pecado mortal cuando se tiene una deuda contraída hace 18 años.

El fútbol está cargado de símbolos y, una vez descontada la Copa, el Madrid debió exigirse a sí mismo la victoria en el Camp Nou, máxime ante un Barça tan agrietado. Un club, el azulgrana, que ha perdido el hilo, víctima de un proyecto inconsistente, plagado de remiendos tras las bajas precipitadas de Cruyff, Núñez, Guardiola y Figo, cuatro arterias vitales en la última y brillante década azulgrana. Ahora, Gaspart y Rexach, dos culés genéticamente puros, viven angustiados por la inmediatez de un curso que se les va de las manos. Malgastado el dinero recibido por Figo, el Barça está a la deriva. Lo mismo juega Reina que Bonano; se tira de Geovanni o de Overmars o de ninguno de los dos; se castiga o se redime a Xavi; se infiltra o se da descanso a Rivaldo... No rotan los jugadores; rotan los sistemas, las ideas, las tácticas, las presiones, los discursos. Y, llegada la hora de la verdad, resulta que Xavi -con todo lo que significa un cuatro en este equipo- salva a Rexach de la misma manera que en la temporada 1998-1999 quitó la soga a Van Gaal con un gol en Valladolid -casualmente, con César de portero rival-. Y, llegado el momento cumbre -la cita de mañana en Estambul-, no estará Rivaldo, lleno de cicatrices tras una temporada con demasiados abusos, pese a que el brasileño ocupa una posición nada deficitaria en este Barça de Kluivert y Saviola. Si los astros o el efecto Xavi -Van Gaal remontó tras lo de Pucela y acabó campeón de Liga- no lo remedian, el Barça sumaría su tercera temporada consecutiva sin un título, un azote de consecuencias imprevisibles. En caso de descabalgarse de la Liga de Campeones, deberá poner los cinco sentidos en la Liga, donde peligra su clasificación incluso para la Copa de la UEFA tras las victorias del Celta y el Athletic, que remontó un partido increíble en Vitoria (2-3), donde el Alavés acabó con ocho jugadores.

Si por arriba la cosa está caliente, por la cola arde con ocho equipos en dos puntos: Mallorca, Villarreal, Osasuna, Real Sociedad, Las Palmas, Zaragoza, Rayo y Tenerife.