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Reportaje:

Democracia a través de las ondas

Un grupo de estudiantes kosovares visita Alicante y Castellón para intercambiar programas y experiencias

Durante la semana pasada una delegación de 13 estudiantes kosovares visitó las universidades valencianas. Siete de ellos estuvieron en Alicante y el resto en la Universidad Jaume I de Castellón. La visita organizada por el Institut Joan Lluís Vives, que aglutina a todas las universidades del ámbito lingüístico catalán, pretende que 'estos alumnos conozcan nuestro sistema universitario, fomenten los intercambios, el pluralismo y su participación democrática', explica Gaspar Hernández, del Centro de Cooperación Internacional de la Universidad de Alicante. Los alumnos de la Universidad de Prishtinës (Pristina) apenas tienen información sobre las actividades académicas, posibilidad de ayudas para viajar al extranjero o de las reformas educativas que se están aplicando. 'La mitad de los estudiantes carecen de información sobre los nuevos planes de estudio', reconoce Ekrem Citaku, un estudiante de medicina que en la actualidad es uno de los responsables de la Radio Vala Rinore. Un grupo de estudiantes iniciaron en octubre de 2000 estas emisiones radiofónicas con el objetivo de ampliar los canales de información. 'Conocer es una garantía democrática, y la mayoría de los estudiantes no tenían datos sobre los planes del Gobierno', reconoce Afrim Hoti, estudiante de Derecho en cursos de posgrado y de Historia.

Los alumnos de la Universidad de Pristina utilizan una radio para informar de los cambios del gobierno en materia educativa

Con una programación musical e informativa, evitan comentarios políticos, y desde las 12 del mediodía hasta las siete de la mañana ofrecen una programación destinada a los 35.000 alumnos de la Universidad de Pristina. El próximo año los seis colaboradores que trabajan a diario en la radio universitaria confían ampliar la potencia del emisor, y llegar a toda la región. Los programas de más éxito y audiencia, según explica Ilir Kastrati, son los debates y aquellos en los que los oyentes llaman por teléfono y participan. 'Éntre 20 y 30 llamadas cada hora', asegura este representante de la radio juvenil. Después de la guerra se abrieron muchas emisoras de radio, 'que ofrecían información política y entretenimiento, pero ninguna se ocupaba de los estudiantes ni de los jóvenes', lamenta Citaku que nació en 1976.

El Gobierno en estos momentos está aplicando una reforma educativa que afecta a las universidades kosovares. Los estudios se distribuyen en tres años de formación superio universitaria, dos cursos de master y otros tres de doctorado. 'Por este motivo es tan importante que a través de las ondas la gente conozca sus alternativas', matiza Kutjim Kërveshi.

Pero además de conocer cómo funcionan las emisoras radiofónicas en la Comunidad Valenciana, los estudiantes albanokosovares tenían más objetivos. La complicada situación política de su país, que se recupera de la guerra, también es otra de las preocupaciones que tienen estos alumnos. 'La juventud tiene esperanza, queremos que se normalicen las instituciones democráticas, y en estos momentos nosotros miramos hacía la Unión Europea', comenta en inglés Afrim Hoti, antiguo representante del movimiento estudiantil UPSUP. 'La situación ha mejorado mucho, respecto a los años de guerra, pero es necesaria una conferencia internacional que zanje el conflicto', asegura Hoti, quien reconoce el esfuerzo de su gobierno para conseguir la democratización de sus instituciones. 'Queremos la independencia y el ingreso en la Unión Europea'. agrega el representante estudiantil.

El grupo de siste alumnos albanokosovares que conversó con EL PAIS coincide: 'no es una diferencia religiosa lo que nos separa, sino étnica y cultural'. El 93% de la población en Kosovo es albanesa, y el resto son serbios, turcos, bosnios, rusos, gitanos o montenegrinos. 'Pero no hay que olividar que los derechos humanos son para todos, independientemente de la cultura, etnia o religión', explica Ilir Kastrati. En la actualidad de las diez carteras ministeriales que tiene, ocho están en manos de los albaneses, la de Agricultura la dirigen los serbios, y los bosnios y otras minorías se encargan de la Sanidad. Pristina tiene en la actualidad 600.000 habitantes. Antes de la guerra eran 450.000. 'La gente del campo emigró y ahora se ha instalado en la ciudad', explica Kutjim Kërveshi, de 21 años estudiante de Derecho.

Entre el grupo de universitarios que estuvo la semana pasada en Alicante figuraba Vjosa Abazi, licenciada en Arte y una estrella de la música popular albanesa. 'Ser artista es muy difícil, así que presento música en la televisión y la radio', explica la joven promesa de la música de esta región. 'Allí este tipo de música es muy popular, apenas llegan los éxitos en inglés', asegura Abazi. Los estudiantes, que esta semana concluirán en Lleida su periplo por la universidades catalanas, regresarán a Barcelona el día 24 para emprender el camino de vuelta a casa y preparar sus exámenes.

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