La Hispalense acuerda mantener similares cuotas de representación en su claustro tras aplicar la LOU
La Junta de Gobierno de la Universidad de Sevilla acordó ayer mantener similares cuotas de representación en su claustro tras aplicar lo recogido en la Ley Orgánica de Universidades (LOU). Esta decisión del órgano de gobierno de la Hispalense permite que ninguno de los estamentos pertenecientes al claustro vea disminuida su representación, uno de los principales temores que tenían los estudiantes y el personal de administración y servicios (PAS) una vez que se aplicara lo dispuesto en la LOU.
Según el acuerdo adoptado ayer el futuro claustro, que se elegirá el próximo 15 de mayo y queda reducido a 300 miembros claustrales, será prácticamente igual que el actual, 'salvo aquellas adaptaciones derivadas de la nueva definición legal'. La estructuración del nuevo claustro, que fue aprobada por una amplia mayoría -37 votos a favor, cinco en contra y ninguna abstención- quedó fijada así: un 61% de representación para el personal docente e investigador; un 31% para los estudiantes y un 8% para el personal de administración y servicios.
Según estos porcentajes de representación, el claustro que tendrá que elaborar los nuevos Estatutos de la Universidad de Sevilla, ya adaptados a la LOU, quedará repartido de la siguiente forma: 153 representantes de los profesores doctores; 14 representantes de los profesores no doctores; 16 de los profesores contratados e investigadores; 90 representantes de los estudiantes de primer y segundo ciclo; dos representantes de tercer ciclo y 24 representantes del PAS. Además, el delegado del Consejo de Alumnos (Cadus) mantendrá su puesto junto con el rector, el secretario general y el gerente.
En cuanto a las reglas que regirán el proceso electoral, la Junta de Gobierno decidió que sean similares al sistema empleado hasta el momento, en el que el profesorado y el PAS sólo pueden señalar al 70% de los puestos a cubrir, mientras que los estudiantes podrán señalar el 100%.
Mientras, en el Parlamento, el diputado popular Rafael Salas y la consejera de Educación, Cándida Martínez, se enzarzaron en una discusión acerca de los incidentes protagonizados por un grupo de estudiantes al irrumpir en la Junta de Gobierno que se celebraba en el rectorado de la Hispalense el pasado 8 de febrero.
Salas acusó a la consejera de Educación y al presidente de la Junta, Manuel Chaves, de 'alentar' estos hechos y de haber 'perdido los papeles' por su postura contra la LOU. Por su parte, Martínez, quien volvió a condenar cualquier acto de violencia, achacó estas nuevas acusaciones a la frustración del PP: 'Lo que pasa es que ustedes [el PP] están molestos por la fuerte respuesta social que ha generado la LOU'.
