Bayo, Ashkenazy y Guillem destacan en una Quincena vertebrada sobre Rossini

La Quincena Musical emprenderá el próximo 8 de agosto un maratón artístico que reunirá en San Sebastián a primeras figuras de la lírica, la música y la danza del momento. La soprano navarra María Bayo, la bailarina y coreógrafa Sylvie Guillem con el Ballet del Teatro Alla Scala de Milán, y los directores Vladimir Ashkenazy y Christian Zacharías destacan en un cartel marcado por Rossini y la representación de su ópera Il viaggio a Reims.

Los responsables de la Quincena Musical donostiarra ofrecieron ayer un pequeño avance de la programación de la 63ª edición del certamen, que ofrecerá la posibilidad de asistir en un mes a más de 60 espectáculos, entre ballet, representaciones de ópera, conciertos sinfónicos y de cámara y recitales de solistas vocales e instrumentales. Su desarrollo, presidido por un cartel diseñado por la artista Marta Cárdenas, estará marcado por la importante presencia de la obra de Rossini en el programa hasta su clausura el 8 de septiembre.

Dos de los platos fuertes de este festival, la actuación de María Bayo y la ópera representada de la presente edición, estarán vertebradas sobre la obra de dicho compositor. La soprano navarra ofrecerá el 17 de agosto un recital integrado exclusivamente por piezas de Rossini, acompañada por la orquesta de cámara Concerto Italiano que dirige Rinaldo Alessandrini. Y el 6 y el 8 de septiembre, el maestro Alberto Zedda dirigirá Il viaggio a Reims, una producción procedente del Festival de Mozart de La Coruña, con la puesta en escena de Lorenza Codignola y la intervención de cantantes especializados en la obra de este compositor.

En todo caso, en ésta, como en anteriores ediciones, el festival apuesta por el eclecticismo y agrupa en una misma programación propuestas variadas. La primera, el 8 de agosto, tendrá carácter más local con el estreno de Zuk zer dezu?, obra del compositor Félix Ibarrondo que interpretarán la Orquesta Sinfónica de Bilbao y la coral Andra Mari, bajo la dirección de Juan José Mena. Este músico vasco, igual que el francés Olivier Messiaen centrarán gran parte del protagonismo de los ciclos de órgano y de música del siglo XX, en una edición en la que la danza estará representada por una compañía de primera fila: el Ballet del Teatro Alla Scala, de Milán, que representará Giselle, con música de Adolphe Adam y coreografiada y dirigida por la bailarina Sylvie Guillem (15 y 16 de agosto), que actuará como solista junto a Massimo Murru.

La Quincena Musical ha logrado atraer para su programación de 2002 a orquestas, directores y solistas de prestigio. La de Lausana, con Christian Zacharias como pianista y diretor, abordará los Conciertos para piano y orquesta, de Mozart (10, 20 y 21 de agosto); la Sinfónica de la Radio de Berlín y el Orfeón Donostiarra ofrecerán un concierto con obras de Mozart y Bruckner (26 y 27 de agosto) y la Filarmónica Checa, dirigida por Vladimir Ashkenazy, cerrará el mes con dos programas distintos. El programa, aún sin cerrar, incluye también la actuación del violinista Frank Peter Zimmermann dentro del ciclo de cámara.