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Zaplana alaba el apoyo de Pujol al PHN y tacha a los socialistas de rivales de la Comunidad

Obras Públicas asegura que el agua costará igual con el nuevo trazado del trasvase

El País

El culebrón del Plan Hidrológico Nacional (PHN) ofrece cada día un nuevo capítulo. Tras la multitudinaria manifestación contraria al proyecto celebrada el domingo en Barcelona, en la que participaron centenares de miles de catalanes y aragoneses, el presidente de la Generalitat valenciana, Eduardo Zaplana, elogió ayer a su homónimo catalán, Jordi Pujol, cuyo partido apoya el proyecto del Gobierno del PP, al tiempo que calificaba a los socialistas de 'rivales' de la Comunidad Valenciana. Los socialistas acusaron al PP de 'dividir' a los españoles.

Según Zaplana, las manifestaciones contra el Plan Hidrológico Nacional (PHN), como la celebrada el pasado domingo en Barcelona, se enmarcan en una 'estrategia permanente desde hace mucho tiempo de hacer ruido', y están promovidas desde el 'rencor' de quienes 'fueron incapaces' de sacar adelante el proyecto. Era una clara referencia a los socialistas, a quienes Zaplana acusó de encontrarse inmersos en un 'nacionalismo absurdo que todavía profesan en el PSPV, en relación con compañeros de otras comunidades autónomas y que tiene como único objetivo negar el progreso' de la Comunidad Valenciana. A juicio de Zaplana, el 'proyecto federal' del PSOE cambia según el día y 'es el proyecto de partido de algunos, pero no el de los intereses de la Comunidad Valenciana, que va por otro lado'.

Frente a la postura de los socialistas, Zaplana citó la del presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, a quien elogió por la 'firmeza con la que defiende' el plan utilizando, entre otros argumentos, que 'beneficia claramente a la Comunidad Valenciana'. El titular del Consell añadió que la postura de su homónimo catalán demuestra una 'teoría' suya, que explicó así: 'Muchas veces los rivales de esta Comunidad los hemos tenido desenfocados, a lo mejor están más en el seno de algunos partidos en la propia Comunidad Valenciana que en otros lugares'. Era, de nuevo, una referencia a los socialistas.

Tras asegurar que no pretendía 'quitar importancia' a ninguna convocatoria como la del domingo en Barcelona, el presidente de la Generalitat reclamó 'que nadie le quite importancia a la abrumadora posición de la sociedad española en favor del PHN', pues, según añadió, 'si numerosa fue la manifestación' del domingo, 'abrumadora es la posición de los ciudadanos españoles en favor' del PHN. 'Al final' agregó el titular del Consell, 'lo que hay detrás de todo esto es una parte bien intencionada de muchas de las personas que acuden a esas manifestaciones, pero otra no tan bien intencionada de los que las promueven', molestos porque 'no tuvieron el coraje y la fuerza política necesarios' para sacar adelante el proyecto hidrológico.

Según Zaplana, manifestaciones como la de Barcelona no tienen 'ninguna posibilidad' de conseguir que se cumplan 'sus últimas intenciones'. Por eso, advirtió a los promotores de esas manifestaciones de que podrán 'seguir haciendo ruido algunos pero eso no privará al conjunto de todos los españoles y, especialmente, aquellas zonas de España que se denominan la España seca por carecer de recursos hídricos, de poder tener agua', de acuerdo con un reparto 'justo, racional y sensato'. Respecto a las previsiones para este verano, Zaplana dijo que la situación será 'delicada', aunque matizó que no pretendía 'alarmar a nadie porque no hay motivos para ello'.

Por otro lado, el director general de Obras Públicas, Pedro Marco, afirmó ayer que con el nuevo trazado del trasvase del Ebro previsto en el PHN el coste del agua será el mismo, unas 50 pesetas por metro cúbico, informa Efe. Marco hizo estas declaraciones antes de la reunión que mantuvo con miembros de la comisión de trabajo de Medio Ambiente de la patronal autonómica Cierval, a la que acudieron su presidente, Rafael Ferrando, y más de una veintena de empresarios de distintas asociaciones y federaciones.

Marco explicó que, aunque el nuevo trazado del trasvase de Ebro es más corto, el coste del agua es similar al del anterior proyecto, ya que hay que salvar diversos accidentes geográficos, 'para lo que es necesario construir las infraestructuras necesarias para acortar el recorrido'. En este sentido, el director general de Obras Públicas de la Generalitat manifestó que el coste energético de la construcción del trasvase es la mitad de lo que supondría la construcción de desaladoras.

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