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Los cambios de la línea del AVE en Sant Sadurní amenazan la llegada del tren a Barcelona en 2004

Fomento proyecta que el ferrocarril atraviese la población por un viaducto de 900 metros

'Tengo el convencimiento de que Fomento busca problemas en el trazado del AVE para justificar que no va a llegar e Barcelona en 2004'. La afirmación es de Joan Amat, alcalde de Sant Sadurní d'Anoia, quien está dispuesto a llevar el asunto a los tribunales españoles y europeos, lo que, contra su voluntad, comportará aplazar la llegada del AVE a Barcelona en 2004. Se trata, dice, de evitar lo que considera un desaguisado porque 'no podemos ceder a imposiciones injustificadas'. El GIF (Gestor de Infraestructuras Ferroviarias) ha cambiado el trazado sometido a información pública y proyecta que el tren pase por Sant Sadurní por un viaducto de 900 metros de largo y 40 de altura.

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El lunes de la pasada semana se celebró la última de las diversas reuniones entre representantes del consistorio de Sant Sadurní y el GIF, la empresa pública dependiente de Fomento que gestiona la construcción de la línea de alta velocidad. 'El resultado fue calamitoso', explica Amat. 'Hemos hecho todo lo que nos ha pedido el ministerio, hemos encargado un estudio geotécnico a un especialista de la Universidad Politécnica de Cataluña, hemos dibujado trazados alternativos siguiendo los criterios que nos han indicado. Nada. Nos dicen que no sirven. Ni siquiera estoy seguro de que los hayan leído', asegura el alcalde.

Lo cierto es que Sant Sadurní era de las pocas poblaciones que ni siquiera presentó alegaciones al trazado del AVE que el ministerio sometió a información pública, paso previo a la declaración de impacto ambiental. El dibujo que vieron les pareció adecuado y razonable. Y fue el aprobado, hasta que empezaron los cambios.

Entre la vía y la autopista

Este primer trazado pasaba entre la actual autopista A-7 y la línea de Cercanías de Renfe, cruzándola con un túnel paralelo a las vías actuales. A finales de 1999, ya aprobada la declaración de impacto ambiental, las cosas empezaron a torcerse, explican Amat y Jordi Carrillo, gerente del Consorcio Xarxa Viària, que ha trabajado conjuntamente con los ayuntamientos de la zona sobre el trazado del AVE y las modificaciones de algunas carreteras. En esa fecha, el GIF comunicó al Ayuntamiento de Sant Sadurní que el trazado inicialmente decidido no era viable. La solución, les dijeron, era elevar el trazado unos 15 metros para pasar por encima de las vías de Cercanías. Esto suponía construir un viaducto de 900 metros de longitud y 40 de altura. 'Esto supone para la población una agresión visual sólo comparable a la que sufre Martorell con la autopista. Hacer otra cosa igual es hoy inadmisible', explicó Carrillo.

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La irritación del alcalde tiene que ver con la decisión del GIF, pero también con el proceso que ha llevado a tomar esta decisión. 'Nos pidieron un trazado alternativo. Lo hicimos. Nos dijeron que el terreno era inestable, según sus estudios. Nosotros encargamos a un profesor de la UPC que tiene diversos estudios sobre la zona que hiciera un estudio geotécnico y comprobara si era cierto lo que aducía el ministerio. El informe dejaba claro que no', explica Amat, que remata su discurso con la siguiente reflexión: 'El trazado decidido es el mismo que había. La diferencia es que el tren deja de pasar por un túnel para hacerlo por un viaducto de 900 metros de longitud y 40 de altura. Nuestra solución lo hacía pasar a 15 metros. Si el suelo es inestable, ¿no lo será más para una obra de 40 metros de altura que para otra de 15?'.

La decisión de Amat de oponerse por todas las vías, incluidas las judiciales, es firme. 'Sé que esto supone frenar la obra y que puede comportar que no llegue a Barcelona en el 2004 previsto, pero no somos nosotros quienes hemos introducido cambios inaceptables que sólo parecen justificarse con voluntad de dilatar la obra'. Lo único que pedimos es que se haga el trazado sometido a información pública o que se opte por una solución pactada, no impuesta'. El Ayuntamiento de Sant Sadurní trabaja ya en los recursos judiciales y en las denuncias a la Unión Europea y a los departamentos de Medio Ambiente de los gobiernos central y autonómico.

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