Dimite el director del Museo de la Ciencia de La Caixa por sus 'contenidos pueriles'

El director científico de CosmoCaixa, el Museo de la Ciencia de La Caixa en Madrid, Antonio Lazcano, presentó el pasado miércoles su dimisión a la dirección de la Fundación La Caixa, promotora del centro, sólo dos semanas después de haberse incorporado al cargo. Lazcano, científico mexicano experto en genética molecular y catedrático de la Universidad Autónoma de México, acompañó su carta de dimisión con unas declaraciones a Efe en las que acusaba al centro de 'falta de rigor académico e intelectual' y calificaba los contenidos del museo de 'pueriles y erróneos'.

Los responsables del museo, situado en Alcobendas, se mostraron muy sorprendidos por la virulencia de las acusaciones y las negaron rotundamente. 'Los contenidos del museo son elaborados por un grupo de científicos en el Museo de la Ciencia de La Caixa en Barcelona -hermano mayor del de Madrid-, que es un referente en la museografía moderna, y desde luego no son ni remotamente erróneos', explicó ayer el director del museo barcelonés, Jorge Wagensberg.

Wagensberg también negó las acusaciones de 'falta de rigor académico' y achacó esta visión del ex director a su 'incomprensión' del modelo de museo inter-activo que constituye el CosmoCaixa. 'No ha entendido que la función de un museo es divulgar y estimular la curiosidad. Y si lo que considera pueril es que a un niño de seis años no se le explique la ciencia con términos complicados, pues no tengo nada que añadir a eso', declaró.

Un millón de visitas

Desde que abrió sus puertas hace dos años, el museo ha recibido más de un millón de visitas, la mitad de las cuales fueron de escolares de toda España. La dirección del centro recordó que estas cifras son una muestra del éxito del CosmoCaixa y de que las palabras de Lazcano 'no tienen ninguna verosimilitud', según Jesús Arroyo, responsable de comunicación del museo de Alcobendas.

En sus declaraciones, Lazcano acusaba también al museo de carecer de medidas de seguridad en la realización de los talleres infantiles, en los cuales los niños realizan experimentos de varios tipos. Lazcano aludió al caso de un niño al que unas gotas de un producto reactivo le produjeron una 'ligera irritación' en los ojos, según fuentes médicas de Alcobendas, y que Lazcano calificaba de 'daños severos'. 'El museo cumple con todos los criterios de seguridad internacionales en la materia y la prueba es que en 20 años de funcionamiento de estos talleres en el centro de Barcelona no hemos tenido ni un accidente', puntualizó Wagensberg.

Lazcano era la tercera persona en ocupar la dirección del centro desde su apertura, después de Manuel Toharia, que dejó el cargo para dirigir el Museo de las Ciencias de Valencia, y de Jaume Josa, que regresó a la investigación.