La normativa obliga a los diputados a pagar su cuota de la Seguridad Social

La Mesa de la Asamblea, órgano rector del Parlamento madrileño, emitió ayer un comunicado en el que, tras reconocer -como había publicado este periódico- que es la propia Cámara, y no los diputados regionales, quien asume el pago de la cuota obrera (correspondiente al trabajador) a la Seguridad Social, asegura que ésta es una práctica legal y generalizada en todos los parlamentos de España. La normativa que, según la Mesa de la Asamblea, respalda esta fórmula data del 30 de abril de 1982 y es, por tanto, anterior a la constitución de la Cámara madrileña.

Sin embargo, el real decreto -norma de mayor rango- de 7 de diciembre de 1981, en el que se basa esa normativa y que regula el régimen de Seguridad Social para los diputados, dice expresamente que la cuota empresarial (un 33% calculado sobre el salario bruto) será abonada por la Consejería de Sanidad, pero que la cuota obrera ha de ser pagada por cada parlamentario. Así, este decreto sólo otorga a la Asamblea la facultad de ingresar ambas cuotas, no de abonarlas.

Además, catedráticos de Derecho consultados por este periódico aseguran que el Estatuto de los Trabajadores establece que cualquier pacto entre trabajador y empresario para que sea este último quien pague la cuota obrera debe ser declarado nulo, y que esto se aplica también a los funcionarios públicos.

Esa cuota obrera que la Asamblea está pagando a cada diputado supone, según el comunicado de la Mesa, el 4,8% del salario bruto, y no el 6,4% que paga el resto de trabajadores, lo que reduciría de 162 euros a unos 126 euros lo que la Asamblea abona cada mes a la Seguridad Social en lugar del diputado. Dicha reducción se produce porque los parlamentarios no pagan el 1,55% correspondiente al paro, de cuya prestación tampoco disfrutan. La Mesa subraya que, además de no cobrar el paro cuando cesan, sus señorías se ven 'sometidas a un régimen de incompatibilidades en el ejercicio de su actividad profesional'. Un diputado con plus por ejercer una portavocía cobra unos 3.220 euros netos al mes.

El servicio doméstico

La Mesa de la Asamblea justifica, en cualquier caso, que la Cámara madrileña se haga cargo del pago de la cuota obrera con el argumento de que también en otros colectivos el empleador corre con ese gasto. Y pone como único ejemplo a los trabajadores del servicio doméstico, con los que compara la situación de los diputados regionales.

Pero esto tampoco es exacto. En el servicio doméstico la cuota obrera va a cargo del trabajador sólo cuando éste trabaja a tiempo parcial para varios empleadores. Además, otra diferencia entre ambos colectivos es que las empresas que abonan a sus trabajadores la cuota obrera -en contra de lo establecido por el Estatuto de los Trabajadores, según los expertos consultados- lo hacen con dinero propio, mientras que la Asamblea está empleando dinero público.