Educación publicita la red pública para captar a los niños de tres años
El departamento invierte 300.000 euros en una campaña para promocionar la red pública
Los niños de tres años que se incorporarán al sistema educativo vasco por primera vez en el curso 2002-2003 estudiarán de forma mayoritaria en el modelo D (todo en euskera con el castellano como asignatura) en los centros públicos y en el modelo euskaldún y bilingüe (la mitad de materias en castellano y la otra mitad en euskera) en los colegios concertados. Sólo el 7,4% de los niños de 3 años que inicien su escolarización en ambas redes optará por el modelo A en castellano. Estas son las previsiones de Educación para el periodo de prematriculación que empieza el día 18.
La consejera de Educación, Anjeles Iztueta, presentó ayer la campaña de publicidad que ha contratado su departamento para promocionar la Escuela Pública Vasca, a la que definió como una alternativa educacional y formativa de 'calidad y confianza'. La campaña, que comenzó ayer en prensa, radio y televisión, cuenta con un presupuesto de 300.506 euros (50 millones de pesetas). La prematriculación comenzará de manera oficial el próximo día 18 y se prolongará hasta el 1 de marzo.
El departamento ofertará un total de 8.262 plazas en la red pública para las nuevas incorporaciones de niños de tres años, de las que 258 corresponden al modelo A, 1.440 al B (bilingüe) y 6.564 al D. Según los cálculos de la consejera, las aulas públicas acogerán el próximo curso escolar al 49,2% de los nuevos alumnos vascos, frente al 50,8% que irá a los colegios de la red privada concertada.
El reparto del número de plazas en esta red es diferente a los colegios públicos. El 44,5% de los escolares matriculados cursarán su primer año de colegio en el modelo D, el 43,7% en el B y el retsante 11,7% en el modelo A. En total, 16.787 niños podrán acceder al primer nivel educativo, lo que, de confirmarse la cifra, supondría un 3,7% más que el actual curso.
La oferta de plazas efectuada por Educación se apoya en las cifras correspondientes a la relación entre matrículas ofertadas y cubiertas en cada uno de los modelos lingüísticos durante los últimos cursos. La consejera recalcó que es 'clara' la voluntad del departamento de que quede plenamente garantizada la elección de modelo lingüístico por parte de los padres.
Tras analizar las posibles cifras de prematriculaciones, Iztueta valoró tres aspectos. En primer lugar, destacó la estabilidad del sistema, derivada de la entrada de 16.000 nuevos niños cada año. En segundo lugar, resaltó el equilibrio entre las redes pública y privada en cuanto al número de inscripciones. El mantenimiento de este equilibrio es fundamental de cara a la planificación del sistema educativo. Y en tercer lugar, que la apuesta de la sociedad vasca por el bilingüismo es algo irrebatible.
Modelo de calidad
El principal objetivo de la campaña publicitaria que se puso en marcha ayer es trasladar a los ciudadanos de la comunidad autónoma que la Escuela Pública Vasca ofrece la 'máxima' calidad. 'Existe un profesorado de garantía, de alta cualificación. El futuro empieza en la escuela y son los padres y los niños quienes escogerán su futuro'.
Además, el departamento ha querido que la campaña incida en valores como la pluralidad, la tolerancia y la solidaridad, que, según la consejera, son uno de los emblemas del sistema público de enseñanza.
En este sentido, enfatizó la importancia de que los escolares al final de la etapa obligatoria sean trilingües, es decir, que sepan castelleno, euskera e inglés. Para lograr este ambicioso objetivo, Educación trata de generalizar a todos los colegios el programa de introducción temprana del inglés a partir de los cuatro años.
Por otra parte, la consejera expresó su confianza en alcanzar un acuerdo con todos los sindicatos de cara a la oferta pública de empleo, cuyos exámenes se celebrarán en el mes de julio. Precisamente, mañana está prevista una reunión entre las centrales del sector educativo y el departamento para ultimar las bases de las oposiciones, que serán las primeras desde las celebradas en 1994.
La exigencia de que todos los docentes sepan euskera para presentarse a las pruebas ha enfrentado a algunos sindicatos, como Comisiones Obreras y la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT, con el Gobierno. Iztueta reiteró que el departamento está preparando 'una buena oferta' y expresó su confianza en que la reunión sirva para 'desbloquear' esta cuestión.
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