Un proyecto para dar poderes de gran ciudad metropolitana
La Carta Municipal de Barcelona es un instrumento legal que define un régimen especial para la ciudad, en su condición de gran urbe metropolitana. Pretende dotar a su ayuntamiento de poderes dispersos entre la Administración autonómica y la del Estado. Sustituye a la Carta de 1960. La parte relativa a competencias autonómicas fue aprobada en 1998 por el Parlamento catalán. Los aspectos sobre competencias del Estado han de ser aprobados aún por las Cortes. Éstos son los principales aspectos pendientes:
- Tráfico. Otorgar a la Guardia Urbana la facultad para retirar el carné de conducir por infracciones graves en las vías urbanas y ampliar las competencias sancionadoras de los vigilantes de la zona azul.
- Financiación. La Carta propone que el Ayuntamiento de Barcelona tenga una participación en la recaudación de los impuestos indirectos en la ciudad, del 10% en el hidrocarburos y del 5% en el IVA.
- Justicia. Una de las principales innovaciones propuestas en la Carta es el establecimiento de la justicia rápida para los delitos menores, impartida por jueces municipales.
- Seguridad. En materia de seguridad, la Carta propone habilitar a la Guardia Urbana para ejercer funciones de policía judicial y atribuir al alcalde la presidencia de la Junta de Seguridad de la ciudad.
- Residentes. El proyecto de Carta propone dar derecho de voto en las elecciones municipales a los extranjeros empadronados en la ciudad.
- Servicios. La Carta crea consorcios del Ayuntamiento y la Generalitat para coordinar su actuación en materia de urbanismo, vivienda, sanidad, transporte enseñanza y servicios sociales.
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