Fuenlabrada, fábrica de niños

'Hoy es un día raro. No ha venido ninguna pareja a inscribir a su hijo'. Son las diez y media de la mañana en el Registro Civil de Fuenlabrada (178.221 habitantes), y Mar, la funcionaria encargada de las inscripciones, no entiende qué pasa.

'Normalmente tenemos una media de ocho registros al día. En lo que va de año ya llevamos 91 bebés. Y eso que aquí no hay hospital. Está en Leganés, y la mayoría de los padres inscriben allí a sus hijos, aunque sean de Fuenlabrada'. Aun así, este municipio tiene la tasa de natalidad más alta de la región (13 nacidos por cada 1.000 habitantes) y la séptima de España, cuatro puntos por encima de la media nacional.

'El año pasado inscribimos a 1.301 niños. Es increíble. En agosto las colas llegan hasta la puerta; la gente aprovecha las vacaciones para venir', continúa Mar. El Ayuntamiento prevé que en los próximos 10 años se llegue al techo de los 200.000 habitantes.

El barrio de Loranca es un ejemplo de este crecimiento. Hace tres años se construyeron allí más de 7.000 viviendas, de las cuales el 80% era de protección oficial (más baratas). En 1996 vivían en el barrio 5.300 personas y cuatro años después ya eran 23.000 vecinos. 'En Loranca, la que no está embarazada va con el carrito'. Lucila Corral, concejal del Área Social del Consistorio de Fuenlabrada, explica: 'Las parejas jóvenes que se van a vivir juntas compran un piso aquí porque es más barato que en otros sitios de Madrid, y por eso los altos índices de natalidad'. Y añade: 'Hace 25 años esto era un pueblo con dos calles, un Ayuntamiento y una iglesia. Ahora ya es una ciudad'.

Es sorprendente que en el vecino Leganés (173.426 habitantes), situado a sólo 10 kilómetros, ocurra todo lo contrario. Leganés es la localidad española donde la natalidad es más baja (7,2 por 1.000). El precio medio de un piso en este municipio supera en 12.020,24 euros (dos millones de pesetas) el de Fuenlabrada, según el Ministerio de Fomento.

Eugenia Arroyo y su marido, Luis, son un matrimonio tipo de Loranca. Hace tres años compraron un piso nuevo de tres habitaciones con garaje por 63.106 euros (10,5 millones de pesetas), casi tres veces menos de lo que cuesta en Madrid un piso similar. Tienen una hija de tres meses, Adriana, y todo su bloque está lleno de niños.