El 38% del presupuesto de Marbella se destina a las empresas municipales

Después de un año con las cuentas prorrogadas, el Ayuntamiento de Marbella aprobará los presupuestos municipales de 2002, que ascienden a 166.854.630 euros (unos 28.000 millones de pesetas). El documento, que el lunes se someterá a la Comisión de Hacienda, prevé la transferencia de 65 millones de euros (11.000 millones de pesetas) a las sociedades municipales, lo que supone que un 38% del presupuesto fuera del control de la oposición. También se prevé el ingreso de 9.000.000 euros (1.500 millones de pesetas) por convenios urbanísticos.

Los ingresos por convenios urbanísticos podrían aumentar considerablemente si se desbloquea el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella. 'Se oyen rumores de que se va a dar luz verde a la parte suspendida por la Junta y el mercado empieza a resurgir', señaló ayer el concejal de Hacienda, Antonio Luque. 'Estamos convencidos de que tiene que salir por fuerza este año', añadió.

Luque explicó que la valoración de los ingresos corrientes se ha hecho 'con la máxima prudencia', mientras que se ha 'optado por una actitud continuista en lo relativo a gastos'. El capítulo de nóminas se lleva también un gran bocado: 60 millones de euros (10.000 millones de pesetas), el 36 % del presupuesto. De esta cantidad aproximadamente 42 millones de euros son para pagar los sueldos de los trabajadores municipales y el resto para los de las empresas públicas.

El Ayuntamiento ha previsto ingresar 12 millones de euros a través de las enajenaciones de bienes, además de unos cinco millones de euros de distintas subvenciones de la Comunidad Económica Europea a través de los Fondos Feder y de Cohesión, para una planta de residuos sólidos urbanos y parques y jardines. Las inversiones ascenderían, según Luque, a 50 millones de euros, que se destinarán fundamentalmente a obras de infraestructuras y la terminación de los proyectos anunciados por Jesús Gil.

El equipo de gobierno negocia un préstamo de 24 millones de euros (4000 millones de pesetas) con entidades bancarias, que se financiará con los ingresos mensuales del Patronato de Recaudación. Luque explicó que ha sido precisamente la solicitud de este crédito lo que ha retrasado la presentación de los presupuestos de este año.

'Cuando se trata de nosotros, los bancos no están muy dispuestos a conceder préstamos', se quejó el edil, y recordó que 'todos los ayuntamientos tienen dificultades financieras y acuden a créditos privados'.

A este respecto, tachó de 'caciquil' la actitud de algunas entidades financieras 'que ejecutan los embargos', en alusión al Banco de Crédito Local, que reclama un débito impagado de unos 4.000 millones de pesetas. Según Luque, el Ayuntamiento sigue negociando con la entidad el levantamiento del embargo de 148 bienes municipales decretado por un juzgado de Madrid.

Los presupuestos se someterán el lunes a la Comisión de Hacienda, que integran todos los grupos políticos y en la que el GIL cuenta con seis representantes frente a los dos del PSOE, uno del PP, uno del PA y uno del Grupo Mixto. El documento pasará posteriormente al pleno para su aprobación definitiva, lo que se producirá con seguridad dada la mayoría absoluta con la que cuenta el GIL. También se dará cuenta de la liquidación de los presupuestos de 1999 y 2000.

La convocatoria de la comisión de Hacienda sorprendió ayer a la oposición. En los últimos diez años, desde que Jesús Gil llegó a la alcaldía, el Ayuntamiento sólo ha aprobado cinco presupuestos, y en cuatro de los ejercicios se ha trabajado con presupuestos prorrogados. El último data del año 2000 y ascendió a 137 millones de euros (22.780 millones de pesetas), un 19 % menos del que se someterá el lunes a debate. De hecho, éste llega también un poco tarde, ya que por ley el proyecto presupuestario debió aprobarse antes del 31 de diciembre del pasado año. La elaboración del nuevo documento y la liquidación de las cuentas de los últimos ejercicios ha sido reivindicada en numerosas ocasiones por PSOE y PP.