El 'Tío Pep' busca sus raíces

El personaje que más lejos ha llevado el nombre de Muro (El Comtat) provenía de una comarca vecina. El Tío Pep, ahora inmortalizado en 2,10 metros de bronce en Muro, salió de su casa y llegó hasta Muro para comprarse una tartana y un burro. Al menos eso es lo que narra la popular y anónima canción que se tararea 'hasta en Suráfrica'. De ello presume la cronista oficial de Muro, Elia Gosálbez, que se encoge de hombros a la hora de fijar el origen del Tío Pep.

Después de repasar a fondo los archivos municipales, asegura no haber encontrado ni rastro del Tío Pep. 'Al ser popular y no tener un fundamento histórico, nada se sabe de su origen', señaló. 'Ni siquiera está documentado el origen de la canción que lo ha hecho tan famoso', añadió.

En recompensa a tanta publicidad el municipio de Muro ha rendido homenaje a este personaje y le ha alzado un monumento. Diseñado por el escultor local Miguel Payá Sanchis y elaborado por el artista de Carlet Jaume Espí, el Tío Pep se ha quedado definitivamente en Muro.

'Será un referente de la población, un lugar inevitable de visita', señala el concejal de Cultura, José Pascual. A ello ha contribuido la Consejería de Cultura, que se ha comprometido a abonar los 17 millones de pesetas que le ha costado al Ayuntamiento, que preside el alcalde del Bloc Nacionalista, Rafael Climent.

El Instituto de Historia Almoroig, formado por profesores, maestros y aficionados a la cultura popular, historia, costumbre y tradiciones de la comarca quiere poner fin a tanta incógnita y demostrar si es cierta la hipótesis de que el Tío Pep llegó a Muro procedente de La Ribera a comprar su tartana y el burro en la Fireta de Sant Antoni que con más de 300 años de antigüedad este fin de semana ha adoptado al Tío Pep como su anfitrión y elemento de proyección exterior.