Caba niega en el juicio por blanqueo que conociera el origen del dinero de su cliente

El ex alcalde de Estepona, Antonio Caba, dijo ayer en el juicio que se sigue contra él por presunto blanqueo de dinero, que su despacho se limitó a asesorar al empresario turco Levent Ucler y que nunca tuvo conocimiento del origen supuestamente ilegal del dinero de su cliente. Caba explicó en el juicio de la Audiencia Nacional que conoció al principal encausado, Ucler, a finales de 1997, cuando este empresario acudió a su gabinete jurídico para comprar una parcela en Estepona en la que abrió poco después una gasolinera.

En la primera visita a su despacho, según el ex alcalde socialista, Ucler manifestó su deseo de llevar a cabo inversiones en España a través de distintas sociedades, para lo cual pidió asesoramiento al gabinete. Caba le aconsejó la constitución de sociedades extranjeras 'debido a su situación irregular en España', y le explicó distintas posibilidades de inversión, 'indicándole las ventajas e inconvenientes de cada una de ellas'. A continuación, puso en contacto al empresario turco con Francis Napoly -otro de los acusados-, que actuaba como asesor y contacto habitual de Caba en Gibraltar y 'a quien solía remitir a los clientes interesados en invertir a través de sociedades no residentes'. Caba afirmó que 'jamás' preguntó a Ucler ni llegó a tener conocimiento del origen del dinero que el empresario invirtió para, supuestamente, blanquear capitales procedentes de actividades relacionadas con el narcotráfico.

Las labores de asesoramiento del despacho de Caba incluyeron también la intervención de Juan Carlos Marín, asesor fiscal y socio del gabinete, también juzgado en este proceso, que actuó como administrador de la sociedad que gestionaba la gasolinera de Estepona hasta que Ucler regularizó su situación en España.

En su declaración, Marín explicó que como administrador llevaba a a cabo la previsión de pagos 'y otras labores de carácter administrativo, obedeciendo las instrucciones de Ucler', y que nunca tuvo conocimiento de las operaciones que se realizaron entre las sociedades del empresario.

Otro de los acusados, Feuzi Cemil, explicó que conoció a Ucler en la cárcel y que volvió a coincidir años después con él 'por casualidad', cuando se encontraron en Marbella, momento en que comenzaron una relación de amistad. Feuzi Cemil declaró que se convirtió en el apoderado de Ucler cuando el empresario ingresó en prisión, en junio de 2000. La Fiscalía Antidroga pide para Antonio Caba, Juan Carlos Marín, Francis Napoly y Levent Ucler cinco años de prisión y una multa de 1.500 millones de pesetas (más de nueve millones de euros).