Safin avala a la nueva generación

Tal como ya ocurrió en el Abierto de Estados Unidos de 2000, el ruso Marat Safin volvió a dar crédito a la generación de los New Balls, please, nombre con el que la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) promocionó a las promesas más destacadas. Safin ganó entonces el Open de EEUU, superando a Pete Sampras en la final. Y ayer, en octavos de final del Abierto de Australia, revalidó aquella historia y volvió a imponer el poder de la nueva generación.

Los últimos años de la historia de Sampras, ya con 30, irán irremisiblemente ligados al cambio generacional. Desde que ganó el torneo de Wimbledon 2000 y alcanzó el inigualable récord de 13 títulos del Grand Slam, Sampras ha ido sucumbiendo al empuje de los nuevos jugadores. En sus dos últimas finales grandes, perdió frente a Safin y ante el australiano Lleyton Hewitt (Open de EE UU 2001), los dos abanderados de los new balls.

Safin, de 22 años, se enfrentará en cuartos al surafricano Wayne Ferreira, de 30 años, que ayer cerró la escalada de Albert Costa. Le ganó en cinco mangas, con 9-7 en la última. Costa se sobrepuso en la cuarta manga, cuando Ferreira servía para el partido y forzó la quinta, en la que tuvo cuatro bolas de rotura. Hace un año probablemente no habría llegado tan lejos. Perdió. Pero parece claro que ha asumido ya su doble paternidad y que ahora quiere asentar su carrera.

En la otra semifinal, Tommy Haas, otra cara nueva, jugará ante el recuperado Marcelo Ríos. En el cuadro femenino, todas las favoritas avanzaron a cuartos.