El 55% de los permisos por arraigo para inmigrantes está sin resolver

El 55% de las 117.000 solicitudes presentadas en Madrid al proceso de regularización por arraigo de inmigrantes, finalizado en agosto de 2001, están aún sin resolver. El delegado del Gobierno, Francisco Javier Ansuátegui, que ha facilitado estos datos a ONG y sindicatos en una reunión reciente, se ha comprometido a tener resueltos todos los expedientes el próximo abril. De las 53.000 peticiones instruidas hasta el momento, el 82% ha recibido el visto bueno, por lo que sus solicitantes obtendrán un permiso de residencia. El 35% de los peticionarios son ecuatorianos; el 19%, colombianos; el 12%, rumanos; el 8%, marroquíes, y hay un 3% de ucranios, chinos y búlgaros.

Los sindicatos USO y UGT y varias de las ONG presentes en la reunión con Ansuátegui, como la Asamblea de Cooperación por la Paz, ARI-Perú, AESCO y SOS Racismo, critican que, seis meses después de finalizar la citada regularización, sólo se haya resuelto el 45% de las solicitudes presentadas.

'Las explicaciones y disculpas aportadas por las autoridades para justificar el retraso nos parecen insuficientes. Detrás de esas solicitudes se encuentran personas que están viendo vulnerado su derecho al trabajo y que se hallan desinformados y a merced de un procedimiento administrativo que parece no tener fin. Ni la propia Administración sabe, como ha quedado presente en la reunión, qué criterios se están siguiendo para denegar o conceder los permisos, qué va a ocurrir con las personas que no se regularicen a través de este proceso', aseguran estas entidades en una nota.

Sindicatos y ONG reclaman más recursos humanos y materiales en las dependencias donde se tramitan los expedientes de la última regularización, así como otros trámites de extranjería (regularización de 2000, régimen general...). Portavoces de la Delegación del Gobierno aseguran, por su parte, que 'se trabaja a marchas forzadas, con turnos de mañana y tarde e incluso sábados'.

'Retrasos injustificados'

Las ONG llevaban esperando desde septiembre una reunión con Ansuátegui para tratar sobre los retrasos en la concesión de los permisos de trabajo y residencia a extranjeros. Estas entidades denuncian desde hace meses 'la indefensión legal que sufren miles de inmigrantes en Madrid por el retraso injustificado del Ministerio del Interior en la resolución de sus solicitudes'.

Sostienen, y la Delegación del Gobierno lo corrobora, que hay esperas de más de un año desde que el inmigrante recibe la carta del Ministerio de Trabajo que le permite desempeñar un empleo en España hasta que el Ministerio del Interior le da la tarjeta plastificada que acredita su estancia legal. Por ejemplo, de los 60.000 inmigrantes que se presentaron a la regularización de 2000, aún hay unos 3.000 pendientes de la tarjeta. Sin ella, los extranjeros tienen más problemas para hallar un empleo y conservarlo, y deben esperar más tiempo para traer consigo a su familia.