Los adolescentes ya pueden preguntar

¿Qué puede hacer un adolescente cuando, por ejemplo, quiere preguntar cómo se usa un preservativo y le da pánico, o simplemente corte, acudir a sus padres? ¿O cuando quiere saber si su falta de hambre es por anorexia? Más de una veintena de centros educativos de la provincia de Granada podrán responder a partir de ahora a cuestiones como ésas gracias a un programa puesto en marcha por la Junta de Andalucía y que se experimentará en este curso. Los adolescentes ya pueden preguntar sin que se vulnere su intimidad.

Uno de esos centros es el instituto de secundaria Pedro Soto de Rojas, el barrio granadino del Zaidín que, junto a otro instituto, el Miguel de Cervantes, ha comenzado a poner en práctica el Plan de Atención a los Problemas de Salud de los Jóvenes, que incluye programas como Forma Joven.

El programa puede orientar a chicas que teman haberse quedado embarazadas

'Es un proyecto en el que están implicadas las consejerías de Presidencia, de Asuntos Sociales, de Sanidad y de Educación', explica José Fernández, orientador del Pedro Soto de Rojas. 'Se trata de un programa que se aplica en los centros escolares en los que, una vez a la semana, los adolescentes pueden consultar a personal sanitario sobre todas sus dudas y curiosidades de forma absolutamente íntima, sin que nadie más lo sepa'. 'Así', añade, 'se sienten más desinhibidos, porque están en su instituto, que es un poco su terreno, y porque pueden hacer preguntas que no harían, por ejemplo, delante de sus padres'.

Y las preguntas pueden ser de todas clases. Desde cómo es un tratamiento para dientes torcidos a que puede pasar si un joven tiene una pierna más corta que otra. Vale cualquier consulta.

'Una vez a la semana, acudirá al centro un pediatra de adolescentes', comenta Fernández. 'Todo el que quiera, podrá preguntar sobre los temas que le interesen, sobre las cosas que más le afecten'.

Para preparar el programa, el personal del Pedro Soto de Rojas ya realizó una encuesta entre los estudiantes sobre los asuntos que más le atraían. 'Son sobre todo', dice Fernández, 'cosas relacionadas con el sexo'.

El programa Forma joven puede orientar a chicas de 14 o 15 años que teman haberse quedado embarazadas sobre los pasos que deben seguir gracias a la ayuda del Instituto Andaluz de la Mujer. También puede orientar en la prevención de enfermedades de transmisión sexual, en adicciones a drogas o en salud mental y auto estima.

Otra de las iniciativas del plan, uno de los primeros que se ponen en marcha en España de estas características, es la creación de la figura de los mediadores, es decir, adolescentes que se formarán para concienciar a sus compañeros sobre los peligros de las enfermedades de transmisión sexual o la drogadicción.

'Se trata de algo original y novedoso y que implica no sólo al mundo de los docentes, sino al de la salud', explica Elena Castro, la directora del instituto, que cuenta con 200 estudiantes. 'Mediante una cita previa, los estudiantes quedan con el médico o con personal sanitario para contarle sus cosas, sabiendo que se va a respetar la intimidad'.

Elena Castro y José Fernández coinciden en afirmar que, nada más conocer la iniciativa, los alumnos del centro se mostraron entusiasmados con la idea. Además del plan en sí, habrá también una labor de promoción mediante folletos explicativos objeto de prevenir sobre embarazos no deseados o cualquier otro problema.

'El proyecto está orientado para cubrir las necesidades de jóvenes entre los 12 y los 18 años, es decir, toda la adolescencia', señala la directora. 'Para nosotros es algo muy interesante porque aborda una problemática que los jóvenes, por sí solos, no sabrían cómo resolver, a qué clase de especialista deberían acudir, cosas de ese tipo.'