La protección de los 'lugares sensibles'
El PSOE terció ayer en la polémica sobre la protección de la población ante las emisiones radioeléctricas. Según su secretaria de Medio Ambiente, Cristina Narbona, el Real Decreto dl 28 de septiembre 'no garantiza en absoluto la seguridad de los ciudadanos' frente a los efectos de las antenas de telefonía móvil.
Las críticas de Narbona se refieren, sobre todo, a un apartado del artículo 8 del decreto. En él se dice que en la planificación de las instalaciones radioeléctricas, los titulares de las mismas deberán tener en consideración 'de manera particular, la ubicación, características y condiciones de funcionamiento de las instalaciones' que 'debe minimizar, en la mayor medida de lo posible, los niveles de emisión sobre espacios sensibles, como escuelas, centros de salud, hospitales o parques públicos'.
Juan Represa, uno de los autores de la recomendación de la UE en que se basa el decreto, achaca esta frase, que parece indicar que hay cierto riesgo para algunos grupos de población, a un 'problema de traducción'. 'Lo que se debe decir es que se minimice el riesgo de que se superen los niveles', explica. 'Ello quiere decir que si hay dos posibles ubicaciones, una cerca de un lugar sensible y otra más alejada, se recomienda que se escoja la segunda', añade el experto. Las críticas del PSOE se unen a las del Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, quien ayer insistió en reclamar al Ministerio de Ciencia y Tecnología que revise el decreto.
Desde el Ministerio de Ciencia y Tecnología, el director general de Telecomunicaciones, Bernardo Pérez de León, pidió tranquilidad a los ciudadanos y aseguró que 'los niveles de protección sanitaria' son 'sólidos, suficientes y adecuados'.
