Barberá pretende urbanizar 61.440 metros cuadrados del parque natural de L'Albufera
La alcaldesa desea ampliar el núcleo urbano de Pinedo a costa del entorno del lago
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha hecho suya una petición del alcalde pedáneo de Pinedo y ha iniciado los trámites para urbanizar 61.440 metros cuadrados del Parque Natural de la Albufera lindantes con el pueblo. Uno de los motivos alegados es la falta de viviendas en la localidad -dependiente administrativamente de Valencia- ante el crecimiento de su población. El concejal socialista, Rafael Rubio, apuntó, sin embargo, que entre 1996 y 2001 Pinedo ha crecido en tres habitantes, según el censo municipal, y que hay espacio urbano sin edificar en el pueblo.
El 18 diciembre pasado, el ayuntamiento tomó el testigo de un proceso que el alcalde pedáneo de Pinedo, José Navarro, inició en febrero de 1999 y que tiene por objeto modificar el plan general de Valencia. Tras las reiteradas peticiones recibidas por la alcaldesa de Valencia, a finales de año, Rita Barberá dió el visto bueno a iniciar las actuaciones para recortar la extensión del Parque Natural de L'Albufera en 62.000 metros cuadrados y modificar estas 6,2 hectáreas de suelo protegido a edificable. En la práctica, esta decisión se ha traducido en el documento remitido a la comisión de gobierno municipal por parte de la Alcaldía de Valencia en el que se encarga a la sociedad municipal Aumsa la redacción de la homologación sectorial modificativa con ordenación pormenorizada el entorno de Pinedo y Estudio de Impacto Ambiental.
En sus peticiones, el responsable de la pedanía se quejaba en un escrito de 1999 de la 'escasez de suelo urbanizable' y la 'emigración' de 'la población joven' de la localidad en busca de otras ubicaciones para viviendas y familias. La falta de servicios y la ocupación de actuales viviendas por el desarrollo de la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) portuarias eran otros de los motivos que sustentaron la solicitud.
En el escrito, Navarro planteaba que la población del pueblo era de 1.000 familias, 3.650 habitantes, que se distribuyen en una extensión de 255.000 metros cuadrados. Y en un documento anexo de noviembre de 2000, el alcalde de la pedanía aumentaba el número de habitantes hasta los 3.000 en el núcleo urbano y otros 859 'diseminados'.
Por todo ello, solicitaba un 'proyecto de urbanización' que permitiera la edificación de 600 viviendas unifamiliares adosadas. El concejal socialista Rafael Rubio criticó ayer que el ayuntamiento haya dado los primeros pasos para 'comer espacio protegido' del entorno de L'Albufera y transformarlo en urbano, ya que, señaló, no existe ninguna justificación para realizarlo.
Sin presión demográfica
Rubio apuntó que no existe ninguna presión demográfica en el pueblo que ampare el crecimiento de la población hacia el sur, como pretende el Ayuntamiento. Así, señaló que de acuerdo con los datos del último censo municipal, el número de habitantes en 1996 era de 2.450, mientras que en 2001 la cifra alcanzaba las 2.453 personas, un aumento de tres vecinos en cinco años. Además, añadió otros datos como el número de viviendas respecto a las familias que pueblan la pedanía. Apuntó que existen 842 familias, de acuerdo a los últimos datos oficiales, mientras que hay 1.152 viviendas, sin contar dos promociones que están en marcha. Al margen de estos datos, Rubio insistió en la falta de necesidad de ampliar la zona urbana del pueblo. Comentó que existen 300 viviendas vacias en el núcleo urbano y que en su actual perímetro hay solares urbanizables suficientes donde construir las 280 viviendas que la pedanía quiere situar en el actual parque natural de L'Albufera.
A falta de la declaración de impacto ambiental, le Consejería de Medio Ambiente ya ha emitido una primera valoración sobre la posibilidad de ampliar el pueblo en dirección al parque. El informe, elaborado por la dirección general de Planificación y Gestión del Medio, destaca en el primer punto de las conclusiones que se admite la posibilidad de crear nuevo suelo urbano 'exclusivamente con finalidad de primera residencia y siempre que se atienda a las necesidades demostradas de expansión vegetativa de los núcleos urbanos o la conveniencia de racionalizar sus límites en términos urbanísticos'. Sin embargo, señala en el siguente punto que corresponderá al Ayuntamiento 'durante la tramitación de la reclasificación, justificar pormenorizadamente su necesidad técnica y social'. Además recuerda que es preceptivo un informe vinculante de Medio Ambiente.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Albufera de Valencia
- Recalificación urbanística
- Valencia
- Ayuntamientos
- Gobierno municipal
- Parques naturales
- Ordenación suelo
- Parques nacionales
- Comunidad Valenciana
- Administración local
- Política municipal
- Desarrollo urbano
- Reservas naturales
- Vivienda
- Espacios naturales
- España
- Urbanismo
- Administración pública
- Política
- Medio ambiente