AI detecta fallos en el control de los videojuegos para menores

Amnistía Internacional (AI), que en 2000 denunció videojuegos que fomentaban en los menores el gusto por la tortura, ha detectado este año fallos en la aplicación del código de autorregulación del sector, y que algunos de esos videojuegos se mantienen, como el titulado Guardián de la mazmorra 2.

'Según el código', dice Susana Fernández, de AI, 'los videojuegos tendrían que llevar etiquetas con la edad recomendada'. 'Hemos detectado que un 24% no la tiene, y sólo el 15% de los anuncios muestra el etiquetado de la Asociación Española de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento (ADESE). Además, en los puntos de venta, alquiler y juego no se separan las zonas de menores y adultos. Tal vez los fallos derivan de la dificultad de implantar el sistema', señala AI, que pide que el código sea 'de obligado cumplimiento, en lugar de voluntario'.

'El código se firmó el 31 de marzo, y supongo que mucho material detectado ahora es anterior', dice Carlos Iglesias, secretario general de ADESE. 'Hay autocontrol, y 20 compañías adheridas, aunque no hemos logrado aún convencer a gigantes como Nintendo'. Iglesias cree que 'lo que debe tener un sitio definido en los puntos de venta es el producto infantil; pero el mercado para adultos no tiene por qué clarificar sus productos con algo similar a la X del género porno en el cine'.