EE UU recupera los misiles Stinger a golpe de talonario

El Pentágono está recomprando los lanzamisiles portátiles Stinger que hace 20 años vendió a los líderes tribales afganos, y paga hasta cuatro veces su precio original. La semana pasada, un oficial de EE UU recuperó cuatro lanzamisiles por 150.000 dólares la unidad, y la oferta sigue abierta, según informó ayer The Boston Globe. El objetivo de la operación recompra es evitar que los viejos Stinger sean utilizados contra los helicópteros que participan en la guerra de Afganistán.

'Bastantes Stinger están aún en funcionamiento, y ésa es la razón de que no se permitan, salvo en caso de emergencia, los aterrizajes diurnos en el aeropuerto de Kandahar', declaró al diario de Boston un portavoz militar. A mediados de los años ochenta, Washington entregó a la resistencia afgana contra la URSS 500 lanzamisiles Stinger, un arma que permitió a los muyahidin derribar hasta 270 helicópteros y aviones. La vida útil del Stinger se estima entre 15 y 20 años. No se sabe cuántos de aquellos lanzamisiles son aún utilizables, pero el Pentágono calcula que unos 50 o 100. Parte de ellos están en poder de las milicias talibanes y de Al Qaeda que han huido.

El Stinger, que lanza misiles atraídos por el calor de los motores a una distancia de cinco kilómetros, costaba 35.000 dólares. 'Pagar ahora por ellos 150.000 dólares es una barbaridad relativa, porque un solo Stinger puede derribar un helicóptero de 10 millones de dólares o un avión de pasajeros', comentó ayer un analista.