Desarticulada una banda de 'narcos' que almacenaba 113 kilos de heroína
El valor de la droga aprehendida alcanza los 5.000 millones
La Guardia Civil de la Comandancia de Madrid ha desarticulado una peligrosa banda de narcotraficantes que se dedicaba a adulterar heroína de gran pureza procedente de las rutas del Este. Los agentes del instituto armado han detenido a siete personas y se han incautado de 113 kilos de ese estupefaciente. Los agentes han logrado desarticular un laboratorio en Cabanillas del Campo (Guadalajara), donde los traficantes almacenaban y adulteraban la droga. El valor de lo aprehendido ronda los 5.000 millones.
Las investigaciones de la denominada Operación Ardilla comenzaron hace seis meses, cuando una patrulla de la Guardia Civil del puesto de Orusco (Madrid) vio cómo el supuesto jefe de la banda, Moharam K. M., de 44 años y de origen iraní, efectuó una maniobra brusca con su vehículo al ver a los agentes. Éstos pararon su coche y comprobaron que llevaba en el interior 12 millones de pesetas, de los que no pudo justificar su procedencia.
Los agentes pasaron toda la información del vehículo al Grupo de Investigación Fiscal y Antidroga (GIFA) de la Comandancia de Madrid, que montó una estrecha vigilancia al supuesto jefe de la banda. Así, descubrieron que otras seis personas formaban parte de este grupo de narcotraficantes y que se movían por los municipios madrileños de Las Rozas, Alcalá, Móstoles y Orusco, además de la capital. Los indicios llevaron a los investigadores a un chalé de Cabanillas del Campo (Guadalajara). La banda efectuaba medidas de contravigilancia para evitar ser descubierta. De este modo, cuando tenían que deshacerse de los envoltorios en los que llegaba la heroína, llegaban a recorrer 50 kilómetros para tirarlos en contenedores.
'Sugar brown'
Los investigadores se dieron cuenta de que habían recibido un importante envío, tras analizar los cartones de los que se deshicieron. Tras aplicarle un reactivo químico, comprobaron que se trataba de heroína, cuya pureza ronda el 80%. Es conocida por el nombre de sugar brown (azúcar marrón).
Los agentes de las Comandancias de Madrid y Guadalajara entraron en el chalé de Cabanillas y aprehendieron más de 88 kilogramos de heroína, 20 kilos de sustancias para su adulteración, un pistola del calibre 9 milímetros Parabellum en perfecto estado y un laboratorio (prensas, filtros, barreños y un microondas) preparado para la manipulación de la droga. Un agente resultó herido leve durante la intervención, ya que los detenidos opusieron gran resistencia. Lanzaron un televisor al agente herido.
El resto de la banda fue detenida en Madrid. Al jefe de la organización le arrestaron cuando se disponía a entrar en su domicilio de Las Rozas. Debajo del asiento de su coche, la Guardia Civil halló un revólver Magnum del calibre 44. El resto de detenidos (de origen polaco, iraní y colombiano) carece, al igual que su jefe, de antecedentes penales.
La organización distribuía la droga por toda la Península, incluido Portugal, y contaba con redes de distribución a pequeña escala. Según la Guardia Civil, esta operación es la más importante contra el tráfico de heroína de los últimos 10 años.
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