Sant Jeroni de Cotalba abre sus muros

El monasterio de Sant Jeroni de Cotalba, ubicado en Alfauir (La Safor), fundado en el siglo XIV y uno de los recintos monacales mejor conservados de la Comunidad Valenciana, abrió ayer sus puertas de forma extraordinaria al público que acudió a la presentación del último libro de Josep Piera, Jo sóc aquest que em dic Ausiàs March (Edicions 62), una recreación de la biografía del poeta medieval, considerado por algunos expertos como el 'más importante' del siglo XV. El edificio es propiedad de la familia Trénor, que sólo en contadas ocasiones (siempre para actos culturales puntuales) ha permitido la apertura del cenobio, declarado Bien de Interés Cultural por la Generalitat. Algunas personalidades de la cultura y la política de la comarca, que se agolpaban en la capilla que acogió el acto y donde varias estufas de gas proporcionaban el único ambiente cálido a la gélida jornada de ayer, confesaron que no habían podido reprimir su curiosidad por conocer el interior de los muros del cenobio, cuyo acceso ha estado restringido durante siglos.

Pero esta situación podría cambiar el próximo año. Los dueños del monasterio y la Generalitat trabajan en la posibilidad de permitir la visita de algunas estancias. Así lo confirmaron ayer Federico Trénor, actual propietario del edificio, y un representante de la Dirección General de Patrimonio que acudieron al monasterio. Pero para ello, la familia Trénor exige dos requisitos: que el Consell se comprometa a 'garantizar las medidas de seguridad' en el interior y exterior del recinto, y a acometer una serie de obras en varias salas de la planta baja. Patrimonio se muestra dispuesto a asumir el compromiso, y anunció que está trabajando en un documento que incluirá la posibilidad de dotar el monumento de 'contenido didáctico'.

La Generalitat, según las mismas fuentes, ha incluido una partida de cerca de siete millones de pesetas en el proyecto de presupuestos para 2002, para el acondicionamiento del recinto.

La propuesta inicial contempla la posibilidad de habilitar el claustro, la sala capitular y la capilla. El acuerdo prevé también adecuar una muestra didáctica en el recinto de la iglesia sobre la historia del monasterio, que 'dote de contenido' las visitas. El resto de salas del complejo permanecerían cerradas y para el uso privado de la familia. Entre ellas el antiguo refectorio, que los monjes utilizaban como comedor en el siglo XIV, reconvertido por los Trénor en un salón privado y que pudo ayer visitarse.

Los propietarios supeditan el proyecto a la necesidad de 'establecer medidas que garanticen la seguridad interior y exterior del recinto', ya que según aseguran que el edificio, rodeado de una gran finca agrícola y visible desde la carretera de Albaida, se encuentra 'desprotegido' por su distancia a un núcleo urbano importante, y ha sufrido varios actos vandálicos y robos de mobiliario. Hace unos ocho años, la Consejería de Cultura realizó unas catas científicas en varias salas que el propietario considera también 'prioritario' acondicionar para facilitar la visita. El acuerdo está 'muy avanzado' coincidieron las dos partes, y aseguraron que la apertura del monasterio será factible en 2002.

El monasterio de Sant Jeroni de Cotalba fue fundado en 1388, en unos terrenos propiedad de Alfons el Vell, duque de Gandia, por la orden de monjes Jerónimos. El edificio estuvo vinculado a los linajes de la Corona de Aragón, y fue el lugar escogido por Pere March, padre del poeta, para ser enterrado junto a su mujer, Constanza. En el monasterio también se encontraban las tumbas de las dos esposas de Ausiàs March, Isabel Martorell y Joana Escorna. Ninguna de las sepulturas, ni siquiera los restos humanos de la familia, se conservan en el recinto monacal, saqueado y expoliado tras la huida de los monjes en 1835. Unos años después, en 1842, Tomás Trénor adquirió el complejo por una modesta suma de dinero. Desde diferentes sectores políticos y sociales de La Safor se ha demandado durante años la apertura del monumento al público.