Hacienda rectifica las actas a Metro 3 y eleva su deuda fiscal a 453 millones

Hacienda ha rectificado la inspección que realizó en 1997 a la inmobiliaria Metro 3, que se saldó con actas de 12 millones de pesetas propuestas por el inspector Álvaro Pernas, actualmente en prisión, según la empresa. Una nueva inspección a la sociedad concluye que debe ingresar 453 millones de pesetas por los impuestos de Sociedades y de Transmisiones Patrimoniales entre los años 1991 y 1995, incluyendo una devolución de 49,9 millones por el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), que la firma habría 'soportado indebidamente', según el informe de Hacienda enviado a la juez Elisabeth Castelló, titular del Juzgado 33 de Barcelona, el pasado verano.

La juez lleva la investigación de numerosas empresas de Barcelona, en un caso en el que están imputados varios inspectores fiscales.

El propietario de Metro 3, Baltasar Aznar, afirmó ayer a este diario que está en desacuerdo con la nueva inspección y señaló que ha pedido al juzgado un nuevo peritaje a cargo de un experto fiscal designado a instancias de su empresa. Aznar negó cualquier pacto pasado con el inspector Pernas para aminorar las inspecciones fiscales. Previamente, la empresa puso en conocimiento de Hacienda las supuestas intenciones del inspector a través de un intermediario.

El informe recuerda que el inspector Pernas tardó cinco años en empezar la inspección a Metro 3, después de haber sido autorizado. Pese al tiempo transcurrido, el informe considera que los ejercicios vueltos a inspeccionar no han prescrito.

La inspección ha tenido en cuenta documentos encontrados a principio de este año en los despachos de Pernas y del antiguo asesor fiscal de Metro 3, Ricardo Valera. Hacienda destaca ahora que no se incorporaron al expediente fiscal de la inmobiliaria varios dictámenes del arquitecto de la Administración sobre los precios de algunas compraventas de solares. Por todo ello, Hacienda dice al juzgado que 'se han encontrado datos y pruebas suficientes como para que cualquier actuario que los hubiera tenido a su disposición hubiera propuesto regularizaciones distintas a las formuladas por el señor Pernas en las actas del 30 de noviembre de 1998'.

La inspección cuestiona varias operaciones realizadas por Metro 3. Entre ellas, la venta de solares, plazas de aparcamiento y locales comerciales en Barcelona a precios que estima que eran inferiores a los de mercado.