Concluye el derribo del interior de la Alhóndiga para que en 15 días comience la excavación de los aparcamientos

Cualquier ciudadano puede comprobar por sí mismo, desde ayer y hasta el próximo viernes, la marcha de las obras de uno de los proyectos estrella del alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, para este mandato. Quienes se acerquen al lugar tendrán una peculiar panorámica de la Alhóndiga: su interior ha sido derribado y las fachadas han sido reforzadas para que en unos 15 días empiece la excavación que dé paso a la construcción de varias plantas de aparcamiento subterráneo.

El alcalde, acompañado por varios concejales de PNV-EA, el PSE y el PP, visitaron el lugar ayer por la mañana. La Alhóndiga ocupa una superficie de unos 8.000 metros cuadrados. Una vez esté terminado el proyecto del actual equipo municipal, en torno a 2004 o 2005, tendrá unas ocho plantas. La inversión global rondará los 8.000 millones de pesetas. Tras la reforma, en el edificio dominarán el acero, el cristal y el hormigón.

La promotora del aparcamiento se encargará de su construcción y explotación. Las 787 plazas se adjudicarán por sorteo entre los vecinos de la zona que lo hayan solicitado. También habrá otras plazas de rotación.

Una vez reconstruida, la Alhóndiga albergará además del párking un centro deportivo y cultural. Las obras marchan al ritmo previsto, según el arquitecto municipal, Elías Mas, pero aún está por determinar cuándo terminarán. Lo que sí explicó Azkuna, en el mirador desde el que los visitantes pueden ver el interior de la Alhóndiga, es que en cuanto el aparcamiento (24.048 metros cuadrados) esté terminado, a mediados de 2003, entrará en funcionamiento. Y paralelamente proseguirá la construcción del resto del edificio.

El Ayuntamiento ha organizado visitas ciudadanas al edificio. Duran 10 minutos, no hace falta cita previa y comienzan en la fachada que da a la calle Fernández del Campo. El alcalde aprovechó para expresar su deseo de que el proyecto de la Alhóndiga incluya también una sala de exposiciones de unos mil metros cuadrados, que sería, al margen de los espacios expositivos del Guggenheim y del Museo de Bellas Artes, una de las más grandes de Vizcaya. El motivo es que, a juicio de Azkuna, Bilbao no cuenta con una sala de exposiciones 'lo suficientemente grande'.

El área de la Alhóndiga dedicada a la cultura y el conocimiento ocupará 9.000 metros cuadrados que albergarán además de la citada sala de exposiciones, una 'gran' biblioteca y auditorios para encuentros diversos. Y la parte dedicada al ocio, con otros 9.000 metros cuadrados de superficie, sumará dos piscinas y un polideportivo, además de salas para prácticas múltiples deportes. Otros 7.500 metros cuadrados se dedicarán a cafeterías, tiendas y oficinas.