Perú apuesta por más privatizaciones

El sueño de Claudio González, peruano de 28 años, casado y con un hijo, consiste en seguir los pasos de su hermano mayor: emigrar a Alemania. Por cargar maletas en uno de los mejores hoteles de su país cobra sólo 100 dólares mensuales, una suma insuficiente para que pueda comprar un televisor en cuotas. También suma algunas propinas, cada vez menores, pues el turismo, una de las principales fuentes de ingresos de Perú, se redujo drásticamente tras los atentados contra Estados Unidos del pasado 11 de septiembre. Claudio comparte con muchos de sus compatriotas y parte de la prensa local la impaciencia de que el presidente Alejandro Toledo, que lleva cuatro meses en el poder, cumpla las numerosas promesas de la campaña electoral.

Alejandro Toledo busca la reactivación del consumo para superar los dos últimos de recesión, fruto de la etapa de Fujimori

El Gobierno apoya un plan de créditos baratos para funcionarios y pensionistas y ha creado un seguro sanitario para los parados

Toledo, que encabezó las protestas que terminaron el año pasado con el Gobierno corrupto de Alberto Fujimori, apuntó sus primeras medidas a la reactivación del consumo y de la inversión. La economía peruana venía soportando dos años de recesión ante la inestabilidad política que sembraron Fujimori y su mano derecha, Vladimiro Montesinos, en ese país con un 35% de pobreza y 15% de indigencia. Después del Gobierno interino de Valentín Paniagua, Toledo llegó al poder al frente de la heterogénea coalición Perú Posible.

Comenzó su mandato con un aumento de 14 dólares a los salarios de los maestros, menor a lo esperado. La nómina de los jueces, en cambio, se incrementó en mayor medida. El Ejecutivo lanzó un programa de empleos de emergencia y apoyó un plan de créditos baratos para los empleados públicos y pensionistas, redujo ciertos impuestos y ahora planea una reforma de la Seguridad Social para gravar las mayores pensiones y elevar las mínimas de 71 a 128 dólares. Esta semana creó un seguro de salud para los 13 de los 24 millones de peruanos sin empleo formal y sin cobertura social.

El Gobierno de Toledo quiere recuperar la inversión extranjera directa, cuya caída en los países emergentes se acentuó después de los sucesos del 11 de septiembre. Para ello recurrirá a la misma herramienta que utilizó Fujimori para expandir la economía peruana en los noventa: privatizaciones y concesiones.