Cañete amenaza a Bono con cobrarle toda la multa de Bruselas por el fraude del lino

El ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, amenazó ayer al presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, con pasarle íntegra la factura que Bruselas exija a España en concepto de devolución de las ayudas del lino. Su argumento fue el siguiente: Bruselas no acusa a España de 'fraude generalizado' en el cobro de ayudas comunitarias del lino, sino de 'pagos indebidos'; la 'gestión' de esas ayudas es 'competencia exclusiva' de las comunidades autónomas; de las tres afectadas, Castilla y León, Extremadura y Castilla-La Mancha, las dos primeras rechazan el dictamen de Bruselas mientras que la presidida por José Bono lo acepta plenamente. Así, pues, Cañete espera que Bono, 'al sufrir las consecuencias económicas de sus actuaciones', vigile mejor el lino en el futuro. El Gobierno de Bono replicó que eso no se lo cree Arias Cañete 'ni harto de vino'.

La Oficina Europea contra el Fraude (OLAF) decidió a finales de octubre castigar a España por el fraude del lino. Le exigió la devolución íntegra de los 21.000 millones de pesetas de ayudas comunitarias para el cultivo y la transformación de esta planta en tejido recibidos por hasta 4.000 agricultores españoles entre 1996 y 1999. El ministro Miguel Arias Cañete compareció ayer a petición del PSOE y de IU en la Comisión de Agricultura del Congreso de los Diputados para explicar qué va a hacer España con la decisión de Bruselas. Arias Cañete anunció, cuando ésta se hizo pública, que recurrirá.

Ayer lo reiteró. Y reforzó su voluntad de recurso porque dos de las tres autonomías afectadas por el supuesto fraude -Castilla y León y Extremadura- le han remitido 'contrainformes' en los que 'califican de incorrecto el informe de la OLAF en cuanto a resultados y metodología utilizada'. Según el ministro, esas dos autonomías 'demuestran la realidad de la transformación realizada en su ámbito territorial con datos fehacientes'.

Admite el engañoPor el 'contrario', continuó Cañete, 'Castilla-La Mancha está de acuerdo con la metodología utilizada por la OLAF aunque discrepa de los resultados de transformación señalados'. Para el Gobierno, 'es muy importante señalar que esta comunidad autónoma admite la existencia de fraude en su ámbito territorial'.

Es 'importante' para Arias Cañete porque si 'sólo una' admite la 'existencia de fraude' es 'fácil deducir que si ha existido negligencia debe de ser en ese ámbito' donde se 'soliciten las posibles responsabilidades políticas'.

Y no sólo las políticas. También las económicas. El Gobierno argumenta que recurrirá la decisión de Bruselas de reclamarles los 21.000 millones de ayudas porque 'únicamente Castilla-La Mancha ha admitido la existencia de fraude en su ámbito territorial'. Por tanto, según Cañete, 'la corrección financiera' no podrá ser de esos 21.000 millones sino que 'deberá ceñirse a las actuaciones realizadas por esa comunidad autónoma y, concretamente, a las cantidades que se hayan pagado irregularmente con certificados de transformación de empresas reconocidas y autorizadas por la autoridad competente de Castilla-La Mancha'. Para cuando llegue esa correción, que Cañete dijo que intentará minimizar en su negociación con Bruselas, el Ejecutivo del Partido Popular pretende pasársela íntegra, por la vía de retenerle otras ayudas regionales, a Castilla-La Mancha.

Es la guerra. Y para ella, Cañete se armó con el escudo de que su actuación 'no es partidista', pues también Extremadura está gobernada por los socialistas pero, contra lo que hace la autonomía de José Bono, 'colabora' con el Gobierno. Para el titular de Agricultura, 'Castilla-La Mancha admite el fraude, que es como decir que no ha vigilado y controlado como debía'. Pues 'lo pagará con sus presupuestos' pues tiene la competencia de solicitar y vigilar esas subvenciones 'desde 1995'. El Ejecutivo se lo cobrará 'mediante la deducción de esos importes de futuros pagos comunitarios' destinados a Castilla-La Mancha.

La cacería'Ustedes no habían medido bien los riesgos cuando iniciaron esta cacería', le espetó el ministro al portavoz socialista en la Comisión, Jesús Cuadrado. Éste le respondió que no esperaba semejante demostración de 'cinismo político', en la que Cañete no sólo elude su responsabilidad sino que, además, pretende 'endosársela a quienes denunciaron la trama de caza primas del lino'.

Cuadrado citó al ex delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Carlos Moro, que reconoció haber recibido 80 millones en subvenciones; al director financiero de Mercasa, Gonzalo Ruiz, y al ex director del FEGA (Fondo Español de Garantía Agraria), Nicolás López de Coca. Todos ellos acabaron dimitiendo salpicados por la trama.

El Gobierno castellano-manchego respondió en tono de chanza. Su consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Alejando Alonso, le dijo al ministro que 'ni harto de vino' se cree que su comunidad vaya a pagar la multa impuesta por la Comisión Europea, informa Europa Press. Alonso calificó la argumentación de Cañete de 'ridícula' y cercana a lo 'cómico'. Y subrayó que su autonomía ha sido la 'responsable de la denuncia, de retirarle las autorizaciones a las plantas transformadoras y de denunciar la trama organizada por el Ministerio de Agricultura en la etapa de Loyola de Palacio'.