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Rato rehúye hablar de sus negocios y recuerda el pasado del PSOE

Los socialistas piden al vicepresidente que no dicte 'auto de prisión' contra la oposición

El PSOE trató ayer de que el vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato, reconociese en el Congreso que no actúa con principios acordes a la ética política al compatibilizar su tarea gubernamental con la posesión de amplios intereses en empresas privadas cuya titularidad comparte con sus hermanos. Rato evitó responder a algunas de las preguntas y optó por atacar al PSOE recordándole su pasado de 'financiación ilegal' a través de Filesa. Los socialistas le censuraron por obtener trato de favor de los bancos en créditos o en compra de participaciones de sus empresas.

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Los socialistas acorralaron ayer al vicepresidente económico en la sesión de control con seis interrogantes sobre las actuaciones públicas y privadas de Rato. El dirigente popular invitó al PSOE a acudir a los tribunales si tenía alguna prueba de comisión de delito, al tiempo que acusó a los diputados que le preguntaban de desplegar toda su artillería para 'perseguir a una familia española', la suya.

De la defensa pasó pronto Rato al ataque con la lectura de párrafos de la sentencia del caso Filesa, en la que dirigentes socialistas fueron condenados por financiación ilegal del PSOE. Los socialistas le reprocharon su interés en dictar 'auto de prisión' para la oposición por ejercer su derecho de controlar al Gobierno

Los cuarenta minutos que duró el rifirrafe de seis diputados socialistas y uno de Iniciativa per Catalunya contra Rodrigo Rato fue tenso y en algunos momentos borrascoso.

El primero que entró en materia fue el diputado de Iniciativa per Catalunya, Joan Saura, que preguntó sobre la compra por parte de Banesto de un importante paquete de acciones de tres empresas endeudas y con pérdidas de la familia Rato. 'Sorprendente e incomprensible, porque son las únicas compras de Banesto ajenas a su grupo corporativo y esto es feo', destacó Saura. El parlamentario recordó que antes de esa compra, en julio de 1998, el abogado del Estado, en nombre del Gobierno solicitó a una juez el archivo del caso de las cesiones de crédito del Banco de Santander, que motivó el interés de la Fiscalía Anticorrupción. Ésta fue la primera vez en la tarde que Rato aconsejó al interpelante que acudiese a los tribunales. 'Si no lo hace es porque su señoría está utilizando una capacidad parlamentaria para injuriar permanentemente a miembros del Gobierno'.

Los socialistas Antonio Cuevas, María Teresa Costa, Ángel Martínez Sanjuán, Máximo Díaz Cano, Germá Bel y Juan Fernando López Aguilar buscaron la crítica al ministro desde diferentes ángulos. 'Sus nombramientos en la CNMV han permitido el robo de 18.000 millones de pesetas y ello por sus criterios de elección de sus colaboradores', le dijo Costa. Rato respondió: 'Si su grupo fuera decente iría a los tribunales después de acusar a funcionarios públicos de un delito'.

Le preguntaron por los criterios para nombrar a sus colaboradores y subió la tensión. Las direcciones del PP y del PSOE contuvieron la respiración cuando el vicepresidente, orillando la pregunta y cogiendo otro camino, volvió a hablar, sin mencionarle, de Jaime González, al que propondrá en breve para la Comisión Nacional de la Energía, a propuesta del PSOE. 'Ése será un colaborador que yo no conozco pero el señor Zapatero sí'.

El vicepresidente también respondió, a otra pregunta socialista, que sus empresas han recibido subvenciones de la administración central en los años en los que gobernaba el PSOE y lo mismo de la administración socialista del Principado de Asturias. '¿Todos ellos han prevaricado?', se preguntó Rato. 'Está haciendo usted mal su trabajo de perseguir a una familia española y hay que tener hombría para reconocer lo que se está haciendo'.

Dimisión

El socialista Antonio Cuevas pidió a Rato que vaya considerando 'la posibilidad de dimitir'. El vicepresidente, reiteró que nunca ha recibido un crédito con un interés por debajo del mercado. 'Además estoy orgulloso de que tanto mis familiares como yo, cuando nos va mal, vendemos nuestro patrimonio para que los trabajadores y los acreedores cobren'.

El socialista Máximo Díaz Cano le calificó de 'ministro a tiempo parcial'. A Germà Bel le tocó encajar la respuesta de Rato sobre Filesa al preguntarle por el blanqueo de dinero a través de entidades financieras que operan en España. 'No existe más que un partido político que tenga cuentas en paraísos fiscales, el PSOE, condenado en sentencia firme'.

López Aguilar fue el último en la carrera de relevos que hizo el PSOE y dijo lo que sus compañeros no tuvieron opción de responder. 'Asuma sus errores sin echar la culpa al pasado ni a los demás y sin amenazar con querellarse contra quienes quieren indagar una estafa y sin intentar dictar prisión provisional contra los miembros de la oposición que le hacen preguntas incómodas'.

Rato, de pie tras Aznar y Rajoy, recibe los aplausos de su grupo parlamentario durante la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso.
Rato, de pie tras Aznar y Rajoy, recibe los aplausos de su grupo parlamentario durante la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso.MANUEL ESCALERA

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