Aznar autoriza al fin la construcción del nuevo hospital Puerta de Hierro

El Consejo de Ministros aprobó ayer, convocar un concurso para la elaboración del proyecto y obras del nuevo hospital Puerta de Hierro, en Majadahonda. La construcción de ese centro, anunciada en febrero de 1999, siendo ministro de Sanidad Jose Manuel Romay Beccaría, supondrá un desembolso de 18.992 millones de pesetas y se acomete con casi dos años de retraso.

Para acelerar el proyecto, el Ayuntamiento de Majadahonda, que cedió el suelo sobre el que se levantará el nuevo centro hospitalario, pidió que el Gobierno regional financiara parte de la obra, a lo que se ha opuesto reiteradamente el consejero de Sanidad, José Ignacio Echániz. La dilación en abordar la construcción del nuevo Puerta de Hierro se ha abordado también en el Congreso de los Diputados. El Gobierno se comprometió a que las obras empezasen a finales del presente ejercicio, con 18 meses de retraso. Pero ese plazo tampoco se cumplirá, ya que por mucho que se aceleren los trámites administrativos del concurso aprobado ayer por el Consejo de MInistros, las máquinas no empezarán a trabajar hasta la primavera de 2002. La superficie a edificar es de 118.604 metros cuadrados y los 18.992 millones del gasto previsto se distribuirán en seis anualidades. El centro no estará concluido, por tanto, hasta el año 2008.

Los facultativos del actual Puerta de Hierro, en la capital madrileña y con graves problemas de acceso, se opusieron en un primer momento al traslado del centro fuera de la capital. Por ello se planteó, en un primer momento que sólo se trasladarían a Majadahonda parte de los servicios, pero finalmente se unificarán todas las dependencias en la nueva sede. Esta tendrá 740 camas y, además de los servicios básicos, contará con unidad de diálisis, hemodinámica, bloque quirúrgico, bloque de obstetriciay unidad de dolor.

Jiménez Díaz

Por otra parte, la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid consideró ayer que la 'única alternativa viable' ante la situación económica de la Fundación Jiménez Díaz (conocida como la clínica de la Concepción) es 'su inclusión en la red sanitaria pública', para lo que insta al gobierno regional y al Ministerio de Sanidad a que aborden una 'rápida intervención', según señaló la propia asociación.

Según el gerente de la fundación Jiménez Díaz, Fernando Astorqui, la institución arrastra una deuda de 6.000 millones de pesetas. Astorqui llegó a asegurar que, si el Insalud no le ayuda a solventar su crisis económica, el centro puede plantearse el cierre. La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid considera que la Jiménez Díaz es un centro 'de elevada calidad asistencial y científica, y sus camas son imprescindibles para la región'. Por eso, según esta asociación, 'no puede plantearse el cierre de este hospital y los poderes públicos deben intervenir'.