Rato no dirigirá la ponencia económica del congreso del PP por primera vez desde 1993

José María Aznar quiere descubrir en el XIV Congreso Nacional del PP a varias figuras nuevas en el partido, por lo que ha encargado que se renueven todos los autores de las ponencias. Esa decisión, que se conocerá en la Junta Directiva del lunes, rompe la tradición de encargar la ponencia económica a Rodrigo Rato, quien la ha dirigido en los tres últimos congresos de 1993, 1996 y 1999. Para Rato se ha reservado una intervención junto a los otros dos vicesecretarios generales, Mariano Rajoy y Jaime Mayor Oreja, a quien el presidente quiere dar relevancia especial.

El secretario general del PP, Javier Arenas, que presentará en el congreso del partido su informe de gestión de estos tres años en el cargo, ajusta estos días con el presidente y su equipo las intervenciones para satisfacer al núcleo dirigente y a los principales barones regionales. El XIV Congreso del PP se ha marcado entre sus objetivos no conceder ninguna pista sobre la sucesión de Aznar.

El propio presidente del Gobierno está llevando al detalle en estos días los pormenores del congreso, que se desarrollará en Madrid los días 25, 26 y 27 de enero, con la ambición de que sirva para definir su proyecto político ante el próximo decenio.

Una de las nuevas ponencias, la que hasta ahora se catalogaba como la más política, será más transversal y tendrá como eje precisamente los retos y objetivos que Aznar se marca para esta década. El anterior responsable de la ponencia política fue Javier Arenas, al que luego eligió el presidente para la secretaría general del PP. Aznar revelará el nombre de los ponentes del XIV congreso el próximo lunes.

El presidente del Gobierno sí ha transmitido que hay que aprovechar el congreso para renovar caras e ideas. No se prevé una gran reestructuración orgánica en los puestos clave de la dirección del PP, aunque sigue sin estar claro si Arenas continuará en el puesto otros tres años o Aznar lo recuperará para un puesto importante en el área política del Gobierno aprovechando una posible remodelación de su Gabinete antes del congreso, de la que no se tienen más que rumores.

Aznar ha pedido que se utilice la proyección de los ponentes para descubrir valores nuevos. En el anterior congreso se encargaron de esas funciones Arenas, Rato, Eduardo Zaplana y Luisa Fernanda Rudi.

Única razón

Por esa 'única' razón, explican en el PP, Rato no desarrollará ahora sus tesis económicas como ha hecho en los tres últimos congresos. El vicepresidente económico tendrá una intervención en lugar destacado ante los 3.000 compromisarios, 500 más que en 1999. Similar trato recibirán los otros dos vicesecretarios generales, Mariano Rajoy y Jaime Mayor Oreja, que tienen intervención reservada en el congreso. El PP quiere tributar un homenaje especial a Jaime Mayor por su peculiar situación tras las elecciones vascas.

Los organizadores del Congreso del partido pretenden reducir de cuatro a tres el número de las ponencias. Los grandes debates ideológicos buscarán redefinir el proyecto político de futuro para España; sentar las bases del modelo de Unión Europea que persigue el PP; y profundizar en las ideas clave del Estado del Bienestar y solidario.

Aznar no quiere conceder ni una sola pista sobre su sucesión y, a la vez, contentar a las principales figuras nacionales y regionales del PP.

Barones regionales tan destacados como Alberto Ruiz-Gallardón o Eduardo Zaplana, que tanto jugo le sacó a su discurso en el pasado congreso, tendrán hueco para intervenir, aunque de rango inferior. En ese contexto habrá un lugar para el presidente del PP de Cataluña, Alberto Fernández; para el presidente del partido en Euskadi, Carlos Iturgaiz, y para dirigentes territoriales jóvenes, como Carlos Floriano, próximo candidato en Extremadura y presidente del partido en esta región.