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CiU y el PP cuestionan la gestión del director de TV-3 y el PSC la alaba

Los nacionalistas se quejan de que la cadena autonómica los ningunea

La lógica política ya no rige las comisiones de control de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV). La comparecencia mensual del director general del organismo en el Parlament no es lo que era desde que Miquel Puig asumió el cargo. Como mandan los cánones, las críticas a sus antecesores procedían de la oposición, mientras que a CiU le correspondía elogiar a TV-3 y Catalunya Ràdio. Con Puig las tornas han cambiado, y ayer quedó más claro que nunca. Fue censurado por CiU y el PP, por distintos motivos, mientras que recibió felicitaciones del PSC-Ciutadans pel Canvi por la reciente cobertura de la moción de censura.

No es ninguna novedad que la gestión de Puig al frente de la televisión y la radio de la Generalitat es cuestionada dentro de su propio partido, CDC, porque dichos medios están ofreciendo una información excesivamente neutral para sus objetivos. Pero, hasta ahora las críticas se habían efectuado sólo en privado. Ayer, en cambio, el grupo de CiU en el Parlament hizo público y evidente su descontento. Y lo hizo no a través de su portavoz en la comisión, Lluís Recoder, sino del diputado Jesús Bartolomé, un político por lo habitual reservado y poco dado a la controversia parlamentaria que, no obstante, se mostró muy combativo.

Bartolomé se quejó de que TV-3 'discrimina reiteradamente' al grupo de CiU. 'Se nos confunde con el Gobierno y no se tiene en cuenta que somos el grupo más numeroso de la Cámara. Parece como si no existieramos', se lamentó. El diputado puso como ejemplo que en uno de los últimos plenos en los que intervino el consejero de Agricultura, Josep Grau, a propósito de la peste porcina, TV-3 filmó las intervenciones en el debate de todos los grupos excepto la de CiU. 'El cámara recogió los bártulos justo cuando íbamos a tomar la palabra', recordó. 'Queremos un tratamiento justo y equilibrado', reivindicó Bartolomé. Y acabó con un toque de ironía: 'A CiU sólo nos hace caso el Diario de sesiones del Parlament; es el único medio en el que aparecemos'.

Puig le dio la razón a Bartolomé en cuanto a su queja concreta del ninguneo de TV-3 a CiU en el debate aludido -'fue un error, pero le pido que no lo considere un hecho significativo'-, sin embargo, evitó responder a la crítica al trato general que la cadena autonómica da al grupo nacionalista.

El otro puyazo de la jornada le vino a Puig del banco del grupo del PP, la formación que da apoyo a los nacionalistas en el Parlament. El diputado Ricard Fernández Déu pidió la dimisión del director de TV-3 -o sea, el propio Miquel Puig, que asumió este cargo tras la marcha de Lluís Oliva- y basó su demanda en la programación del pasado 11 de septiembre. A su juicio, la cobertura informativa de los atentados contra Estados Unidos -un despliegue que ha recibido alabanzas de diversos sectores periodísticos y registró una elevada audiencia- fue tardía -según el diputado del PP, la cadena tardó 16 minutos en reaccionar-, y el concierto que ofreció ese día el 33 desde el Arc de Triomf de Barcelona, con motivo de la Diada, 'un auténtico mitín independentista'.

Puig negó que los servicios informativos de TV-3 hubieran respondido con lentitud al conocer el choque del primer avión contra una de las Torres Gemelas de Nueva York -'he cronometrado personalmente el Telenotícies de aquel día, y lo único que podríamos haber ganado son los tres minutos de deportes que dimos tras ofrecer el primer flash, cuando todavía desconocíamos que se trataba de un acto terrorista', justificó el director general-. En cuanto al concierto de la Diada, Puig respondió al parlamentario que TV-3 es una televisión plural, 'que debe hacerse eco de todas las opciones políticas, sin que ello signifique que nos adherimos a ellas'.

Curiosamente, el beneplácito a su labor le llegó al director general desde las filas de la oposición socialista. El diputado Joan Ferran, aunque confesó no estar seguro de que sus alabanzas le convinieran a Puig dado el poco apego demostrado por los suyos -'no sabemos, fruto de esta extraña situación, si le estamos haciendo un favor o lo perjudicamos'-, le pidió finalmente que trasladara a los profesionales de TV-3 la felicitación de su grupo por la 'correcta' cobertura, la semana pasada, del debate de la moción de censura de Pasqual Maragall contra el Gobierno de la Generalitat.

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