ETA pretendía atentar el pasado fin de semana contra un concejal socialista de Eibar
El comando Aranba de ETA tenía previsto atentar el pasado fin de semana con un coche bomba contra el concejal del PSOE en el Ayuntamiento guipuzcoano de Eibar José Luis Vallés Melero.
Según informaron fuentes jurídicas, esta hipótesis se desprende de las declaraciones ante la policía efectuadas por Luis Mariñelarena y Roberto Lebrero, dos de los detenidos la semana pasada en una de las redadas de Guipúzcoa, que se saldaron con el arresto de siete presuntos etarras.
El juez de la Audiencia Nacional Guillermo Ruiz Polanco tomó ayer declaración a Mariñelarena y a Lebrero, ambos liberados (a sueldo de la banda terrorista), así como a Asier Altuna -concejal de Batasuna en Azcoitia (Guipúzcoa)-, Ángel Murgoitio, Iñaki Ibaibarriaga -ex concejal de HB en Ondárroa- e Ibone Bartarrica. A esta última la dejó el juez en libertad, en tanto ordenó el ingreso en prisión del resto de interrogados. La séptima persona detenida, Oritz Ibaibarriaga, no ha declarado ante la Audiencia Nacional por haber sido puesta en libertad por la policía antes de pasar a disposición judicial.
Durante las redadas, la policía encontró en un garage propiedad de Asier Altuna un vehículo sustraído recientemente en Mondragón, que disponía de placas de matrículas dobladas, para ser utilizado en fechas próximas en algún atentado terrorista. Del contenido de las declaraciones hechas públicas ayer, la policía cree que el comando Aranba tenía previsto atentar el pasado fin de semana, y que la víctima elegida era el citado edil socialista.
AsesinatosDe los interrogatorios policiales se desprende también que Luis Mariñelareña, que se negó ayer a declarar ante el juez Ruiz Polanco, formaba parte del comando Ituren, al que la policía le atribuye los asesinatos del dirigente socialista vasco Fernando Buesa y del miembro de la Ertzaintza quie le acompañaba, Jorge Díez, el 22 de febrero del pasado año.
El presunto etarra Roberto Lebrero dijo ayer al juez haberse inventado las declaraciones que realizó ante la policía. Según éstas, el comando Aranba intervino también en el ataque contra la discoteca La Universal en la localidad navarra de Lacunza, así como en la colocación de artefactos explosivos contra sedes de Caja Vital en Vitoria.
El comando Aranba, añadieron las citadas fuentes, tenía como futuros objetivos de sus acciones terroristas a otros concejales y 'políticos relevantes', a los que había sometido en los últimos meses a 'un alto grado de seguimiento'.
El fiscal imputa a los dos presuntos etarras liberados el delito de pertenencia a banda armada, mientras que a Asier Altuna y a Ángel Murgoitio el de integración . A Iñaki Ibaibarriaga el ministerio público le atribuye un posible delito de colaboración con ETA.
