Los operadores turísticos piden precios más bajos para afrontar la crisis
Los empresarios hoteleros responden que no hay motivo para revisar sus tarifas
La perspectiva de que el movimiento turístico se retraiga en los próximos meses como consecuencia de la crisis mundial por los ataques terroristas contra Estados Unidos ha servido como argumento a los principales operadores internacionales para presionar sobre los hoteles andaluces a fin de conseguir tarifas más baratas. La patronal considera sin embargo que no hay motivos para la revisión de sus precios y ha dado instrucciones a sus asociados de que no cedan un ápice.
En el informe que el Sistema de Análisis y Estadísticas del Turismo de Andalucía (Saeta) ha elaborado sobre la situación del sector tras los atentados del 11 de septiembre contra EE UU, se pone de manifiesto que uno de los pocos efectos conocidos de la crisis en el sector turístico hasta el momento es esta presión de los agentes turísticos, quienes alegan que la disminución de precios contrarrestaría el descenso que pueda sufrir la demanda.
El presidente del Consejo Empresarial de Turismo de Andalucía, Miguel Sánchez, que también ha admitido estos 'intentos' de rebajas, entiende que las agencias hacen 'un planteamiento equivocado' porque si lo que existe es temor a viajar, éste no va a desaparecer porque los precios sean más baratos. 'Si la gente no sale por miedo, lo mismo da que le cueste tres o cuatro', argumenta.
Sánchez además defiende que el actual equilibrio entre precio y calidad de los servicios está 'muy conseguido', y que 'tocarlo ahora sería muy negativo'. También los sindicatos y la Junta rechazan que la rebaja de precios sea un arma efectiva para combatir la previsible crisis, entre otras razones porque ésta ni siquiera puede aún medirse.
Desde la Consejería de Turismo y Deportes se insiste en que la actual situación es de 'incertidumbre', sin que se pueda hablar aún de recesión en el sector, y que es momento de mantenerse a la expectativa y conocer el comportamiento del mercado, y no de empezar a tomar medidas que pueden ser apresuradas y poco acertadas.
Descenso en las reservas
El descenso de un 10% en las reservas realizadas en establecimientos hoteleros andaluces hasta el momento por los operadores británicos y alemanes para la próxima temporada no constituye motivo de alarma para el sector, que entiende que es lógico que así sea hasta que se conozca la evolución del conflicto bélico.
La ocupación de plazas en el mes de septiembre ha sido muy alta -en la Costa del Sol se ha llegado al 90%-, aunque Saeta aventura que habrá un descenso en la llegada de turistas extranjeros en los tres últimos meses del año. Entre octubre y diciembre se produce en torno al 19% del movimiento hotelero de clientes internacionales en Andalucía.
La presión que están ejerciendo las agencias contrasta además con el mensaje que viene lanzando la Asociación Internacional de Touroperadores Turísticos (IFTO), que sostiene que si no se producen atentados terroristas en Europa, el movimiento turístico en el continente apenas se resentirá. Fuentes consultadas del sector coinciden en apreciar que los operadores intentan conseguir la rebaja de las tarifas hoteleras para compensar en los paquetes que ofertan la previsible subida que experimentarán los viajes en avión. La Asociación de Compañías Aéreas Europeas (AEA) prevé que éstas dejarán de ingresar hasta finales de año unos 600.000 millones de pesetas.
El sector turístico andaluz espera además verse beneficiado por el desvío de turistas desde países mucho más afectados por la situación como Marruecos, Egipto, Túnez o Turquía, donde sí se están produciendo cancelaciones masivas.
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