Sopa de Cabra congrega a 2.000 personas contra el Plan Hidrológico

Unas 2.000 personas asistieron al recital que la banda gerundense Sopa de Cabra ofreció el sábado por la noche en el Pabellón Deportivo de Tortosa para mostrar su rechazo del Plan Hidrológico Nacional (PHN), que prevé el trasvase del río Ebro. Tras una bandera con el lema Defendamos el Ebro, trasvase no, el grupo de rock repasó durante dos horas su historia musical y dedicó su célebre canción L'Empordà al movimiento antitrasvase.

Durante el concierto, el líder de Sopa de Cabra, Gerard Quintana, elogió la lucha que lleva a cabo la Plataforma contra el Plan Hidrológico y deseó a los antitrasvase que 'toda la energía, toda la caña y toda la dedicación' que han empleado en sus protestas 'tenga frutos'. 'En el fondo estáis luchando por lo que es justo', sostuvo Quintana, que consideró 'absurdo que saquen el agua de un lugar para llevarla a otro, que quizá no lo necesita, pero curioso que donde la necesitan tengan campos de golf y parques de atracciones'.

El concierto que la banda catalana ofreció anoche en Tortosa es uno de los últimos recitales de Sopa de Cabra, ya que el grupo ha anunciado su disolución.

Previamente, unos 300 jóvenes se concentraron para demostrar que están implicados en la lucha antitrasvase porque creen que el PHN puede mermar las oportunidades de futuro de esta zona del sur de Cataluña. Joan Baiges, portavoz de los Jóvenes en Defensa del Ebro, señaló: 'El acto pretende despertar la conciencia de los jóvenes del territorio para que acaben de implicarse en este movimiento social, ya que nos jugamos nuestras oportunidades de futuro'. Unos 150 jóvenes dibujaron con sus cuerpos la palabra SOS, con la que querían lanzar el mensaje de que 'el Ebro está pidiendo auxilio porque actualmente lleva poca agua y si se lleva a cabo el trasvase será un desastre'.

Ecologistas 'insolidarios'

El consejero de Medio Ambiente, Felip Puig, declaró que la oposición al Mapa Eólico y al PHN 'ha servido para intentar debilitar al Gobierno y tumbar las inciativas'. Puig lamentó las críticas de los ecologistas, a quienes reprochó su discurso 'pasado de moda' y 'poco solidario'. 'El movimiento ecologista español y catalán todavía no ha hecho la conversión de los ecologistas europeos, que se han incorporado a las responsabilidades del Gobierno', explicó. El consejero cree que la visión de los ecologistas es 'poco solidaria con las zonas que necesitan servicios'.

Respecto a la construcción de parques eólicos en parques naturales, Felip Puig afirmó que por ahora no hay ningún proyecto. Sin embargo, no rechaza la idea porque 'no contaminan y porque instalarlos preserva espacios protegidos'. 'Unos molinos de viento se pueden integrar en el paisaje. Me parece más impactante la torre de Collserola o la de Calatrava', añadió. Puig no descartó la instalación de parques eólicos en espacios protegidos.