Las críticas del alcalde a los policías de tráfico desatan las iras de la oposición y los sindicatos

Unas declaraciones del alcalde José María Álvarez del Manzano en las que censuraba la falta de profesionalidad y la apatía -'desapego en la actuación' lo llamó él- de los agentes de tráfico de la Policía Municipal han desatado las críticas de los sindicatos del cuerpo y de la oposición (IU y PSOE). Este último partido cree 'intolerable' lo dicho por el regidor ante cientos de policías con ocasión de la toma de posesión del nuevo inspector jefe, José Luis Morcillo. Este inoportuno conflicto estalla pocos días antes de la remodelación que quiere emprender la edil María Tardón.

'Encuentro algo de desapego en la actuación de la Policía Municipal respecto al tráfico en la ciudad. Un agente en la calle tiene que ser un elemento de respeto y de responsabilidad. Hagan ustedes que los madrileños se sientan orgullosos de la Policía Municipal'. Eso fue lo que dijo el alcalde. Y esa frase desató una convulsión política y sindical.

Unas declaraciones 'impropias de quien es el máximo responsable de la Policía Municipal', afirmó el PSOE. 'Álvarez del Manzano desprecia a todo el cuerpo, acusándole de falta de profesionalidad, de falta de actitud, de falta de dedicación y, lo que es gravísimo, de falta de respeto al uniforme, así como de ser incapaz de imponer la disciplina en las calles y en el tráfico', según el concejal socialista Eugenio Morales.

'Los máximos responsables de la Policía Municipal no creen en ella', aseguró Morales, antes de preguntarse 'qué parte de implicación tiene el alcalde en que sus policías no funcionen'. Después, sugirió a la concejal de Policía Municipal, María Tardón, que dimita por ser incapaz de mejorar el funcionamiento del cuerpo.

El edil socialista puso como 'muestra de la incapacidad de Tardón' la 'tan anunciada y no menos necesaria reorganización de la policía, que parece útil sobre el papel y acaba siendo una serie de agravios y de equivocaciones'. Uno de los proyectos estrella de Tardón consiste en desplegar el mes próximo en todos los distritos la policía de barrio, en lo que supone un nuevo intento de aproximar los agentes a la ciudadanía.

El concejal del PSOE lamenta que el Ayuntamiento vuelva 'a nombrar a toda la cadena de mando de forma provisional, sin hacer oposiciones para inspectores y subinspectores, lo que supone recurrir al dedo para designar categoría y destino, algo que el Reglamento de la Policía no contempla y que es completamente irregular'. 'Y como colofón, toda la cadena de mandos está infradotada: hay 26 oficiales en los 49 puestos que deberían cubrirse, y estas deficiencias son igualmente graves en suboficiales, sargentos y cabos', a juicio del edil socialista.

El concejal de IU Julio Misiego aconsejó a Álvarez del Manzano que, en lugar de lanzar 'moralinas' a los policías, trabaje para mejorar la situación del cuerpo. En su opinión, los comentarios del regidor sobre el comportamiento y la actitud de los agentes encargados de regular el tráfico están fuera de lugar, y añadió que la situación se puede mejorar con la reestructuración del cuerpo, sin nombrar 'a dedo' a la cúpula policial.

'Tenemos un cuerpo de Policía Municipal globalmente aceptable, profesional, y no se puede decir que no funcione', añadió Misiego. Éste, sin embargo, criticó que 'hasta ahora se haya apostado por un modelo organizativo que ya está caduco y que no responde a las necesidades de una ciudad como Madrid'.

Problemas de circulación

El sindicato mayoritario Colectivo Profesional de la Policía Municipal (CPPM) considera que el alcalde 'desprecia y desmerece' la labor de la policía, 'y más concretamente la de los compañeros que prestan su servicio en las unidades de tráfico, que tienen que enfrentarse a los graves problemas de circulación'.

Este grupo de funcionarios acusó al Ejecutivo local de 'estar más preocupado por recaudar dinero para las arcas municipales que de la movilidad de los conductores madrileños'.

'El alcalde', continúa el Colectivo Profesional de Policía Municipal, 'se exime de sus responsabilidades en el problema del tráfico y carga contra el eslabón más débil, que es la policía, un cuerpo que debe soportar durante horas humos, frío e incluso las iras de los conductores por su falta de capacidad'.

Especialmente dura fue la Unión de Policía Municipal, que, tras tildar a Álvarez del Manzano de 'su mayor enemigo', afirma que éste utiliza a la policía 'para engordar las arcas municipales y de Emitra mediante el servicio de grúa'. Este sindicato acusa al regidor de haber convertido 'Madrid en una ratonera para millones de conductores'.