_
_
_
_
_
COYUNTURA AGRARIA

El precio de la tierra para usos agrarios se frenó en 2000 con un aumento del 6,9%

La incertidumbre ante la reforma de la política comunitaria para el sector contuvo las subidas

Los precios de la tierra para usos agrarios experimentaron el año pasado una importante desaceleración tras una larga época de fuertes subidas casi de forma ininterrumpida. En 2000, los precios se incrementaron un 6,9%, según datos del Ministerio de Agricultura, frente al alza del 11,4% de 1999. La aprobación de la Agenda 2000 por parte de la Unión Europea, con una nueva reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) y el recorte de los precios de intervención no compensados con ayudas directas, ha jugado en contra de la euforia en los precios de la tierra.

Más información
Las ayudas a la producción del arroz se reducirán casi el 50%
Expertos piden un modelo de cultivo más respetuoso con el medio ambiente

Como en campañas anteriores, las subidas más importantes del precio de la tierra han correspondido a las superficies de viñedo y olivar, según los datos elaborados por el Ministerio de Agricultura de acuerdo con la información suministrada por las comunidades autónomas. Suben más las tierras de cultivo que los pastizales y las tierras de secano más que las de regadío. El incremento medio, sin embargo, dista mucho de la subida del 13,4% de 1997 o el alza récord de 1998 (un 16,15%).

El precio medio de una hectárea de tierra para usos agrícolas se situó en 2000 en 967.000 pesetas, frente a a las 905.000 pesetas del año anterior. El precio medio de una hectárea de tierra para usos agrícolas ascendía en 1983, primer año en la elaboración de la encuesta del Ministerio de Agricultura, a 340.000 pesetas. Desde entonces, los precios de la tierra han tenido un comportamiento alcista con la excepción de un tramo entre 1989 y 1999, que coincidió con el periodo de incertidumbre ante la reforma de la Política Agrícola Común en 1992. Durante estos 17 años, la tasa anual acumulativa supone una subida del 6%.

Aprobada la reforma de 1992, los precios de la tierra iniciaron nuevamente una fuerte línea de subida qeu ha ido perdiendo fuerza en los últimos años. Pero la aprobación de la Agenda 2000 en 1999, ha vuelto a contener los precios. La ayuda para el olivar, pese a las penalizaciones sufridas por rebasar la cuota y los apoyos para reconvertir el viñedo, mantiene a estos cultivos en la lista de alzas superiores a la media.

En el último año, frente a la subida media de los precios de la tierra del 6,9%, se produjeron incrementos superiores a esa cifra en Madrid (20%), Cataluña (13%), Murcia (12,1%), Extremadura y Andalucía, con el 10,5% y 10,8%, respectivamente, y País Vasco, con el 9,3%. En este comportamiento de las subidas han jugado un papel determinante dos factores. En casos como la comunidad de Madrid, la subida de los precios de la tierra tiene un componente más ligado a cuestiones urbanísticas o de servicios que a la simple demanda para usos agrarios. Tanto en el País Vasco como en Cataluña, Extremadura o Andalucía, la subida media se ha debido fundamentalmente a los mayores precios pagados por las superficies dedicadas a el viñedo en Álava y a los olivos.

Frente al precio medio de la hectárea de tierra para usos agrarios en toda España, hay una gran disparidad entre las comunidades autónomas. En el País Vasco, el precio medio de una hectárea es de casi cinco millones de pesetas casi exclusivamente por los altos precios pagados por el viñedo en la Rioja alavesa. En los últimos 17 años, las mayores subidas correspondieron a las comunidades autónomas de Extremadura, Andalucía, Castilla La Mancha, País Vasco y Canarias.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_