El cumplimiento de la resolución queda bloqueado

Pese a tratarse de un auto muy escueto, el tribunal es muy claro en el mandato que dirige a la dirección general de la Agencia para la Calidad, Evaluación y Modernización de los Servicios Asistenciales. La sección tercera de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia conmina a Sanidad a inscribir, de forma provisional, al nuevo hospital en el registro de Centros, Servicios y Establecimientos Sanitarios. 'Llévese a efectos la medida cautelar positiva acordada' en el auto previo, señala la última resolución del TSJ. 'Y a tal fin, conmínese a la dirección general de la Agencia para la Calidad, Evaluación y Modernización de los Servicios Asistenciales al objeto de que sean llevados a su debido efecto con inscripción de la autorización, con carácter provisional, en el registro de Centros, Serviucios y Establecimientos Sanitarios', concluye la sala.

La resolución es tan explícita que al llegar a la dirección general de la Agencia, que dirige Rosa Roca, se procedió a la redacción de la resolución destinada a autorizar la inscripción del hospital en el registro de la Consejería. Roca firmó y dió salida al documento en dirección al registro, como establece el procedimiento administrativo ordinario que regula este tipo de autorizaciones. Sin embargo, el documento no traspasó la dirección general. Pese a haberse dado salida formalmente al escrito, como figura en el registro, según fuentes consultadas, la autorización aún no ha salido de la consejería. Una vez realizados los pasos ordinarios, altos cargos de la consejería intervinieron para evitar que el permiso provisional destinado a dar luz verde a un nuevo centro se ejecutase, tal y como dicta el TSJ. Las mismas fuentes apuntan a que la consejería está estudiando la fórmula de evitar que el nuevo hospital se inscriba en el registro.

Este diario intentó ayer, sin éxito, recabar la versión de los hechos de la Consejería de Sanidad. El departamento que dirige Serafín Castellano tampoco explicó los motivos que llevaron a la consejería a aceptar la ampliación de la Clínica Benidorm cuando poco antes se denegó el permiso al nuevo centro. Entonces la oposición cargó duramente contra Sanidad al entender que desde el Consell se están favoreciendo intereses privados, en este caso de la clínica que dirige Carlos Paz. El PSPV acusó a Castellano de bloquear las intenciones de Hospimar para evitar que la Clínica Benidorm pierda la hegemonía que mantiene en la ciudad turística.