El presupuesto de la UE recibe mayor aportación española

La aportación de España al presupuesto comunitario en 2002 se eleva a 8.086,55 millones de euros, lo que supone un 9,1% más frente a las cuentas de este año. Los pagos comunitarios hacia la economía española, por su parte, crecen mucho menos, apenas un 3,7%, hasta los 14.796,75 millones de euros. Así, el saldo con la UE, a pesar de que sigue siendo positivo para España (6.710,20 millones), se reduce un 2,17% con respecto al de 2001.

España ha sido uno de los países de la Unión más beneficiados por las aportaciones europeas. En 2000 fue el que más dinero comunitario recibió, según confirmó ayer la comisaria de Presupuestos, Michaele Schreyer. Para 2002, a pesar de que el saldo positivo con la UE se reducirá, los aportes europeos a la economía española seguirán siendo significativos.

Del total de lo que la UE destinará a España el próximo año, 6.529,97 millones de euros provendrán de los fondos estructurales. De esta cifra, a su vez, 3.667,14 millones procederán del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), 1.456,46 millones del Fondo Social Europeo (FSE) y 1.406,37 millones del Feoga-Orientación, IFOP y otros. Del Feoga-Garantía, que es el instrumento financiero con que cuenta la UE para aplicar la política agraria común (PAC), se destinarán a España 6.444,88 millones, mientras que del Fondo de Cohesión se recibirán 1.502,48 millones. España también recibirá 319,44 millones correspondientes al 25% por gastos de recaudación de recursos propios tradicionales y otras transferencias.

Por su parte, España aportará a la UE 4.386,99 millones de euros por su producto nacional bruto (PNB), un 34,7% más que en 2001, mientras que en concepto de IVA transferirá 2.472,48 millones, un 17,4% menos a causa de la reducción del tipo máximo de dicho tributo. Los recursos propios tradicionales que aportará España al presupuesto comunitario ascenderán a 1.109,47 millones de euros -un 7,9% más que en 2001- y los que destinará al Fondo Europeo de Desarrollo (FED) sumarán 117 millones, un 13,5% menos que en el presente ejercicio.

Como años anteriores, los principios de rigor, disciplina y austeridad defendidos por Bruselas son las bases del presupuesto comunitario para 2002. Por nada del mundo, la Comisión quiere que el gasto de la UE se relaje en el primer año de circulación del euro en 12 de los 15 países de la Unión.

Ajuste de gastos

La Comisión ha elaborado el anteproyecto de presupuesto comunitario teniendo muy en cuenta esos principios. Ello se pone de manifiesto en la diferencia entre los límites de gasto fijados en las perspectivas financieras y los créditos del anteproyecto de presupuesto. En éste, Bruselas ha previsto una dotación de 100.364,2 millones de euros en créditos de compromiso y 97.806,9 millones para créditos de pago, lo que representa un incremento del 3,5% y 4,3%, respectivamente, frente a 2001. La cifra total de créditos, sin embargo, está 474,8 millones por debajo del límite anual fijado en las perspectivas financieras 2000-2006.

Los gastos que más aumentan son los agrarios. Un 5%, hasta los 46.221 millones de euros, para el gasto agrario y un 2,8% para el desarrollo rural, 33.638 millones, el máximo previsto en las perspectivas financieras. Los fondos estructurales tienen créditos por 30.849 millones de euros, y los fijados para los Fondos de Cohesión, según lo pactado en el Consejo Europeo de Berlín, se elevan a 2.789 millones. Los demás gastos se mantienen estables o incluso bajan, como los administrativos. También se reducen los gastos exteriores debido a que el esfuerzo financiero para la reconstrucción de los Balcanes se centró en los ejercicios 2000 y 2001.