El factor Dios
Soy un camionero de 34 años. No tengo gran cultura, pero la vida me ha enseñado muchas cosas.
El martes paré a comer en un bar de carretera y eché un vistazo a EL PAÍS. Leí -como supongoque muchas personas estos días- todo lo referido a lo de las Torres Gemelas y, en concreto, el artículo del señor Saramago. ¡Qué bien escribe este hombre!, porque no he entendido casi nada. Sólo algo y, por eso, escribo esta carta.
¿Cómo se le ocurre mezclar a Dios en todo este fregado? Porque parece ser que es la creencia en Dios lo que ha llevado a cometer semejante barbaridad. Yo creo en Dios, Él me ayuda y me habla durante las largas horas que paso en la carretera. Me pide que ayude a mis compañeros, a mi familia, a mis amigos; que tenga caridad y paciencia, porque Él la tuvo con nosotros. Y digo: ¿no será cosa de política todo este lío que se ha montado? Por favor, no me mezcle a Dios en líos humanos.
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