Grupos ecologistas de Tarragona piden una moratoria en la instalación de industrias en la petroquímica

Grupos ecologistas de Tarragona solicitan una moratoria en la instalación de nuevas empresas en el complejo petroquímico de Tarragona, después del accidente ocurrido el pasado viernes en una fábrica de fertilizantes de Toulouse, que causó 29 muertos y 700 heridos, varias decenas de ellos muy graves.

El accidente tuvo un impacto inmediato en la ciudad de Tarragona, que cuenta con dos polígonos petroquímicos situados a pocos kilómetros de la ciudad. La comisión constituida inmediatamente después del accidente a instancias del alcalde de la ciudad, Joan Miquel Nadal, se ha reunido para analizar lo ocurrido en Toulouse y varios de sus miembros se trasladarán a la ciudad francesa para recabar detalles de lo sucedido.

Entre quienes han reaccionado al accidente se encuentran los grupos ecologistas. Varios de estos grupos alertan de que Toulouse constituye un ejemplo de que 'los fallos existen'. Algunos de estos grupos solicitan una moratoria para la implantación de nuevas industrias en el polígono petroquímico de Tarragona hasta que no se elabore un plan de ordenación del sector.

Uno de los primeros grupos ecologistas en advertir a la población de que Tarragona no está exenta de riesgos como el que ha ocasionado el accidente de la planta francesa es Mediterrània. Este colectivo considera que es necesario reactivar la información del Plaseqta (Plan de Seguridad Química de Tarragona) a los vecinos, potenciar los simulacros con carácter más general, con periodicidad anual y con el objetivo de superar los errores detectados en el último realizado (el único en el que se involucró a la ciudadanía, aunque no de carácter obligatorio).

Según explicó ayer su portavoz, Ángel Juárez, Mediterrània considera necesario realizar un estudio epidemiológico en la población de Tarragona para analizar si la presencia de la petroquímica causa problemas. 'Llevamos 20 años solicitándolo', explica. También propone un estudio de impacto ambiental. Juárez solicita una reunión con la junta directiva de la Asociación Empresarial Química de Tarragona (AEQT) para abordar estos asuntos.

Este grupo ecologista advierte también sobre el peligro que representa la existencia de un aparcamiento de camiones para el traslado de materias peligrosas 'que se encuentra saturado' por lo que en las afueras del recinto quedan camiones sin control con productos altamente tóxicos'.

El GEPEC, por su parte, se muestra más beligerante y solicita una moratoria para la implantación de nuevas empresas químicas en Tarragona hasta que exista un plan de ordenamiento del sector, especialmente necesario después de que sociedades como Repsol o Basf hayan hecho públicas sus intenciones de ampliar su negocio en la zona.

El grupo ecologista recuerda su oposición a la colocación de dos grandes depósitos de amoniaco en las cercanías al barrio pesquero del Serrallo, así como la cantidad de accidentes de mayor o menor gravedad que ha acumulado el sector químico en los últimos años. Asimismo, demanda un aumento de la vigilancia y el control del funcionamiento de las químicas. Tanto GEPEC como Mediterrània exigen participar en la comisión creada tras el accidente de Toulouse.