Adena ve un trasfondo especulativo en el nuevo plan urbano de Alicante

La delegación en Alicante del Fondo Mundial para la Naturaleza WWF/Adena considera 'innecesaria y contraproducente' la ampliación de suelo urbanizable prevista en el avance del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio. Ese incremento, sostienen los ecologistas, tiene un 'trasfondo especulativo que a la larga acabarán pagando los ciudadanos con la pérdida de eficiencia en dotaciones y servicios públicos'.

En sus alegaciones al avance del nuevo PGOU, cuyo periodo de exposición al público expira el viernes, Adena considera que las medidas que contempla el nuevo ordenamiento urbano de Alicante tienden de forma inconfundible hacia una ciudad difusa. El núcleo urbano consolidado, dicen los conservacionistas, cae en el olvido, y no se aplican correcciones a fenómenos tan graves como el vaciado de la población en la ciudad construida.

La ampliación del suelo urbanizable es 'completamente innecesaria y contraproducente, y muy negativa para la ciudad a la largo plazo'. Como alternativa para la supervivencia del potente sector inmobiliario de la ciudad, Adena propone la adopción de un escenario general de rehabilitación de la ciudad construida que permita la limitación del crecimiento en superficie.

Los ecologistas quieren que se ponga coto a la emisión de licencias urbanísticas a través de un sistema de limitación porcentual, de foma que se pueda controlar el ritmo de construcción y evitar tanto los periodos de desarrollo incontrolados y agresivos del sector inmobiliario como sus periodos de crisis.

El documento de Adena resalta las 'lagunas' del planeamiento en el ámbito de la calidad ambiental del municipio y es especialmente crítico con la falta de medidas sobre la movilidad del tráfico rodado y los sistemas de transporte colectivo.

El nuevo PGOU se 'olvida' de la ciudad construida y sólo se ocupa del desarrollo de extrarradio, y las propuestas de zonas verdes son 'muy deficientes'. Las alegaciones de Adena no sólo contienen críticas. Propone la ejecución de un 'cinturón verde' a lo largo de la A-7 en su tramo que circunvala Alicante asociado a un proyecto de viarios peatonales diseñados en forma radial, para unir casco urbano y perímetro de la ciudad.

Sobre la isla de Tabarca, Adena rechaza cualquier incremento en la densidad de edificación, es decir, un 'crecimiento cero' que también debería aplicarse a todas las zonas adyacentes al dominio público marítimo-terrestre.

El PGOU debería incluir, a su juicio, medidas efectivas para la protección del litoral y los diferentes ecosistemas que éste alberga: sistemas dunares, saladares, acantilados costeros, playas y praderas de poseidonia oceánica.

Los espacios naturales de alto valor ambiental, Adena propone que se declaren como parajes naturales municipales. Así deberían considerarse la Serra Grossa, el Monte Benacantil, la Sierra de Orgegia, los Lagos de Rabasa y el Saladar de Agua Amarga.

Aunque los ecologistas admiten que la filosofía del nuevo plan urbano es positiva en líneas generales, luego 'no encontramos relación alguna entre la declaración de intenciones del PGOU y las medidas concretas que se proponen aplicar'.