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UGT denuncia la 'mafia' que existe en la construcción en Quijorna

F. Javier Barroso

Un obrero de unos 20 años, cuya identidad aún se desconoce, falleció ayer en un tajo de Quijorna (890 habitantes) alrededor de las once y media de la mañana, cuando tocó un cable eléctrico que alimentaba un elevador. Los trabajadores de esta obra aseguraron a la Guardia Civil que el empleado no estaba contratado allí. Los agentes de la Brigada Judicial del instituto armado han abierto una investigación para determinar quién es la víctima y qué hacía en el tajo, según señaló un portavoz de este Cuerpo. Con el accidente mortal de ayer, son 29 las muertes que se han registrado en la región en el sector de la construcción desde el comienzo del año.

El accidente ocurrió en la calle de Gerona número 7, en un chalé en el que se estaba levantando la segunda planta. El obrero, que iba vestido con un mono de trabajo y calzaba unas zapatillas deportivas, cogió el gancho del maniquillo (elevador utilizado para transportar los materiales de la construcción). Recibió entonces una descarga mortal, en la mano derecha, que le salió por un tobillo, según explicaron fuentes médicas. Sus compañeroslo trasladaron al centro de salud de la localidad, a unos 100 metros del lugar del accidente.

El médico de guardia intentó reanimar al obrero herido y, ante la gravedad de las lesiones, avisó a una UVI móvil del Servicio de Emergencias y Rescate de la Comunidad de Madrid (Sercam), según informó un portavoz de Emergencias 112. Sus facultativos intentaron reanimarlo durante 30 minutos, pero al final sólo pudieron certificar su muerte.

Los trabajadores de esta obra señalaron ayer a la Guardia Civil que la víctima se había presentado en el tajo para pedir trabajo. Acto seguido, según ellos, se acercó al gancho del maquinillo y se electrocutó. Los agentes de la Brigada Judicial no creyeron esta versión y han comenzado una investigación para determinar la identidad de la víctima, ya que estaba indocumentado y no llevaba ningún documento que permitiera deducir su filiación. El único dato fiable es que se trata de un extranjero de unos 20 años, según determinó la forense encargada del caso. Los guardias civiles advirtieron a los obreros de las consecuencias jurídicas, incluida la pena de cárcel, que implicaría haber testificado en falso.

Otros obreros de la zona acudieron al centro de salud a instancias de la Guardia Civil para intentar identificar al fallecido. Ninguno de los empleados logró dar datos sobre él. Afirmaron a los agentes del instituto armado que nunca había sido visto por la zona. Finalmente, el cuerpo sin vida del obrero fue trasladado por la tarde al tanatorio de Móstoles, donde hoy se le practicará la autopsia. El juzgado número 4 de la localidad mostoleña se encarga de la instrucción del caso.

La Guardia Civil tiene previsto enseñar la fotografía del fallecido entre los obreros de los municipios limítrofes a Quijorna para saber si alguien lo había visto en los últimos días.

'Especulación urbanística'

El responsable de Salud Laboral de Construcción de UGT-Madrid, Antonio Rodríguez, denunció ayer 'la mafia que existe en el sector urbanístico' de Quijorna. Rodríguez aseguró que muchos obreros trabajan en ese municipio en obras de chalés y viviendas unifamiliares en condiciones precarias y con contratos ilegales. Además, según dijo, no se suelen cumplir las condiciones mínimas de seguridad en los tajos. 'El alcalde [Florentino Serrano, del Grupo Independiente de Quijorna] debería poner freno a toda la especulación urbanística que se está dando en el municipio', señaló el responsable de Salud Laboral, que tampoco cree la versión de que la víctima fuera a pedir trabajo al chalé de la calle de Gerona y muriera tras tocar un cable eléctrico.

Por otra parte, el pasado viernes falleció el obrero Antonio López, de 31 años, que resultó herido muy grave y con riesgo de muerte cerebral tras caer desde un cuarto piso hasta un andamio situado en la segunda planta de un edificio en reforma de la madrileña Gran Vía, según informaron fuentes del hospital Clínico, donde fue ingresado el trabajador tras el accidente.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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