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CARTAS AL DIRECTOR
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Terrorismo contra Estados Unidos 7

¿Cuánta gente estará entendiendo la magnitud de lo que significa lo que ha pasado?

¿Cuánta gente entenderá de dónde sale ese odio, esa ira, ese 'no tener nada que perder ni temer, ni siquiera su propia vida', de esta gente que hace estas cosas tan inhumanas?

He oído las declaraciones de la portavoz del Gobierno palestino, una señora que no me acuerdo cómo se llama pero que me parece muy respetable, que decía: nuestro pueblo quiere la paz, no es justo que porque unos pocos grupos aplaudan la atrocidad del hecho eso se magnifique y nos juzguen a todos. ¡Nuestro pueblo quiere la paz!

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Y luego las declaraciones del Gobierno cubano: nuestros aeropuertos están a la orden por si los necesitan, tenemos médicos y enfermeras dispuestos a ayudar. Tenemos mucha gente dispuesta a donar sangre si se necesita... y he llorado mucho, porque sé que el pueblo cubano es así de noble... el pueblo es noble, ¡los pueblos son nobles!, ya que hay gente buena en Irak, en La Habana, en Nueva York, en Tokio, en París, en Tegucigalpa, en Suráfrica, en Miami, en Bilbao, en Tel Aviv, en Otawa... ¡En todas partes!

Y entonces pienso: cuántas veces en el mundo han pasado cosas similares (aunque en menor escala, pero ¿vale menos la vida de una persona que la de 10?). La cosa es compleja: han muerto inocentes, hay gente inocente llorando a sus muertos, hay gente sufriendo, consternada... pero sigue habiéndola también en el mundo desigual que promueve el poder económico de las grandes potencias: mueren niños por falta de medicinas, agua y salud, muere gente por ataques relámpago de rutina del Ejército estadounidense o israelí (hace poco murieron ocho en Irak, y eso ¡ni es noticia!)

Lo que pasa es que de repente unas muertes son más previsibles, unas son televisadas y otras ignoradas. ¿Se acuerdan de aquellas legiones de africanos que morían de hambre hace poco, esos que han salido por miles en fotos, famélicos y llenos de moscas, y que ya no parecen humanos, sino que nos hemos acostumbrado a ver como especie diferente a la nuestra (como si fueran rebaños de alguna especie lejana a nuestra condición)? ¿Quién ha clamado por vengar esas muertes? ¿Quién ha buscado a los causantes de ese terrorismo en masa?

¿Qué han hecho los poderosos de Estados Unidos para provocar esta reacción tan desalmada? ¿Cuánta gente en el mundo se está preguntando eso? Los culpables deben ser identificados y perseguidos... Hasta ahora, el máximo sospechoso, ese hombre de película, extraño, exótico y poderoso fue ayudado por la CIA durante años en su lucha contra los soviéticos. Igual que McVeight fue condecorado en la Guerra del Golfo, igual que en su momento Sadam Husein fue ayudado por Estados Unidos.

Nadie ha hecho nada por los pobres y las mujeres de Afganistán ahora. Los máximos gritos contra los talibán se oyeron cuando destruyeron los tesoros arqueológicos, pero no cuando destruyeron la dignidad de sus mujeres.

Si se demuestra que fue este tipo que vive allí, Bin Laden, ¿entonces EE UU atacará a Afganistán y sus mujeres muertas de hambre morirán a causa de las bombas tal vez tratando de proteger bajo sus burkas a sus hijos hambrientos, y su pueblo sediento y desolado anegará esa tierra seca con su sangre ignorante e inocente? Tan inocente como la de cualquier policía o bombero neoyorquino, o estimable y bien peinada señora de negocios, o joven emprendedor de la Gran Manzana... o niño rosado y rubio habitante de uno de esos condominios que dicen que han tenido que evacuar.

Pienso en mucho de esto. Mientras veía una y mil veces el segundo avión dirigirse contra la segunda torre pensé en el piloto. ¿Qué clase de locura lo lleva a ese suicidio tan atroz?, a no pensar en la gente que llevaba en el avión, a no pensar en la gente que iba a destruir. Es inconcebible. Para mí es un gran aviso de lo que es capaz de hacer esta humanidad descontrolada. ¿No somos parte de ella? ¿Vamos a seguir siendo sólo espectadores?

¡Estoy tan asustada! He recordado lo pequeña que soy y lo pequeños que somos todos.

¿Odio, venganza, guerra, serán soluciones? No sé.

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