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16 empresas se han interesado ya por el nuevo centro de juego

Vicente G. Olaya

De momento, nadie ha hecho una apuesta formal por el futuro casino de Aranjuez, pero 16 empresas -españolas y extranjeras- ya han retirado los pliegos de condiciones del concurso. Estas sociedades estudiarán durante el próximo mes las posibilidades de levantar el primer casino del sur de Madrid antes de realizar su oferta.

El Gobierno regional se muestra hermético a la hora de dar a conocer sus nombres, pero algunos ya se conocen desde hace meses: Cirsa, la gran multinacional española del juego; el Casino de Torrelodones -que sufrirá directamente la competencia del de Aranjuez-, y dos grandes grupos especializados en el juego en Las Vegas (EE UU) se hallan entre ellas. No obstante, las empresas norteamericanas interesadas en entrar en el mercado español se han mostrado sorprendidas por los altos tipos impositivos de los juegos de azar en Europa. Por ello, estas entidades siguen haciendo cálculos y escrutando las probabilidades de hacer un buen negocio a orillas del Tajo.

La diputada socialista María Luisa Álvarez Durante cree, sin embargo, que los números no les cuadran a las principales empresas del sector. 'Las sociedades especializadas en el juego no tienen un interés especial en este concurso, porque ha salido a un precio muy alto [6.000 millones de pesetas]. Las únicas interesadas son las inmobiliarias'.

La diputada sostiene que 'es, incluso, dudoso que en Aranjuez haya espacio para el juego, pero, si fuese así, las inversiones que se realizarían, para hacerlo rentable, no serán tan altas como afirma el Gobierno regional'.

Puestos de trabajo

Álvarez Durante afirma que las empresas del sector le han manifestado que están dispuestas a invertir unos 2.000 millones de pesetas en el nuevo complejo de ocio, 'por lo que no se crearán', señala, 'los 2.000 o 3.000 puestos de trabajo que dice el alcalde'.

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La parlamentaria del PSOE augura un 'casino lleno de tragaperras, y no de mesas de juego, dado el perfil económico de la zona sur'. 'Los residentes en esta parte de la región, con un poder económico bajo, serán atraídos por los promotores del casino con máquinas tragaperras, unas máquinas que crean mucha adicción. Estoy convencida de que habrá un aumento importante de las ludopatías en la zona', augura.

Álvarez Durante cree, finalmente, que el Ejecutivo de Alberto Ruiz-Gallardón 'tenía que haber pedido compensaciones culturales y sociales a los promotores del casino, como ocurre en Estoril [Portugal], donde sus gestores hacen fuertes inversiones en cultura'.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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