Nuevos jardines y reforma en el Paseo de Coches

El Paseo de Coches del Retiro se va a reformar para recuperar su aspecto primigenio y olvidar la estructura de vía pública que aún conserva. Desde 1984, el parque del Retiro es un recinto prohibido para los automovilistas, pero el Paseo de Coches aún mantiene el carácter de cuando los coches atravesaban el parque. El Ayuntamiento ha decidido, y así lo anunciaron ayer la primera teniente de alcalde, Mercedes de la Merced, y el concejal de Medio Ambiente, Adriano García-Loygorri, invertir 160 millones en la reforma del Paseo de Coches. Las obras, que ya han comenzado, estrecharán la calzada actual de asfalto, que mide ahora 32 metros y que cuando todo termine contará sólo con 29, es decir, un metro y medio menos por cada lado. También se plantarán cerca de 1.000 arbustos y 62 árboles. Además, se repararán las farolas.

No es ésta la única actuación que el área de Medio Ambiente realiza estos días en el Retiro. En total, invertirá más de 1.000 millones en distintos trabajos. Uno de ellos consiste en reformar una de las zonas más degradadas, situada en el sur, cerca de la cuesta de Moyano. Los técnicos municipales han empleado casi un año en arreglar unos jardines isabelinos de casi 56.000 metros cuadrados. La zona contará con tres fuentes de piedra y 12 bancos, que conforman tres pequeñas glorietas en medio de los caminos de los jardines. En esta parte del parque han sido plantados 325 árboles, más de 3.500 arbustos, 18.000 setos y 68.000 plantas tapizantes. Los madrileños podrán visitar la zona a partir de septiembre, fecha en que el concejal de Medio Ambiente calcula que los trabajos estarán completamente terminados. Hasta entonces, el área permanecerá vallada para protegerla mejor.

En otoño también será vaciado el estanque. Las filtraciones que padece, por las que se pierden más de 5.000 litros de agua al día, han forzado a los técnicos del Ayuntamiento a tomar esta drástica decisión, que no se llevaba a cabo desde 1980. Tras vaciarlo, se impermeabilizará el vaso. Las más de 1.500 carpas y carpines que ahora nadan allí serán trasladadas al lugar que determine la Comunidad de Madrid.

La reforma del estanque, que durará alrededor de cuatro meses, permitirá también recuperar la Fuente Egipcia. Actualmente, la estación depuradora se encuentra al lado de este monumento. El Ayuntamiento tiene previsto trasladarla detrás de los hangares, con lo que la Fuente Egipcia quedará más liberada.