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El Real Madrid 'rebaja' a los 'ultrasur'

El club niega que la medida sea por seguridad

Por una de las puertas del estadio Santiago Bernabéu no paraban ayer de entrar y salir trabajadores provistos del casco de seguridad. Sacaban numerosos escombros. Otros operarios levantaban una estructura metálica en la zona de las oficinas. Dentro del estadio había más obras. La actividad era incesante.

Una de las obras afecta al grupo más conocido de aficionados madridistas: los ultrasur. Su grada, la de la zona sur del estadio, está siendo remodelada. Los dirigentes del club han aprobado un proyecto -ahora en ejecución- por el que se ha decidido rebajar en casi medio metro, 47 centímetros, la altura de una superficie de 600 metros cuadrados de la grada sur.

Los dirigentes madridistas afirman que se trata de una medida para mejorar la visibilidad de los aficionados que ven los partidos justo en los asientos situados en la parte de la grada que hay encima de los ultrasur. 'Hay jóvenes muy animosos que no sólo presencian los partidos de pie, sino que además se suben encima de los asientos para estar más altos', explicó ayer Julio González, responsable del área de infraestruturas del club blanco. 'Claro, esta actitud perjudica la visibilidad de los espectadores que están situados en las filas superiores y eso había que arreglarlo', afirma González.

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El Real Madrid cambiará, además, los asientos que hasta ahora había en la grada sur del estadio. Se pondrán unos asientos abatibles en lugar de los actuales, que son rígidos. Los dirigentes madridistas afirman que esta medida supondrá, en la práctica, una rebaja de casi un metro para los aficionados. 'Es de suponer que ya no se pondrán de pie en los asientos, por lo que lo que se logra bajar los 80 centímetros', asegura González.

Los asientos a sustituir se instalaron justo antes de la temporada 96-97, en obligado cumplimiento de un decreto gubernamental aprobado en 1993 que regula la prevención de la violencia en los espectáculos deportivos. Todos los estadios de España se tuvieron que adecuar a la nueva normativa y donde antes había entradas de pie para los aficionados tuvieron que poner asientos.

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La nueva obra que se realiza en la grada sur 'no es una medida de seguridad, sino que trata de mejorar la visión de algunos espectadores. El club lleva ya tres o cuatro años sin ningún problema de seguridad en ese sector sur del estadio', aseveró el dirigente.

Inundación

Por otra parte, el túnel que conecta el exterior del estadio con el terreno de juego, denominado túnel de carros, que pasa por debajo de las gradas, se inundó ayer por la rotura de una tubería de agua. Se trata de un túnel empleado por el personal de mantenimiento y por el que se mete maquinaria dentro del estadio para la ejecución de obras o para realizar los cuidados del césped.

La rotura de la tubería de agua se debió a un exceso de presión. Varios aspersores del sistema de regadío automático se habían roto durante la realización de obras en el interior del estadio, pero la bomba de presión seguía abierta. La junta de un codo de la canalización no soportó la presión y reventó. Los bomberos del Ayuntamiento acudieron a achicar el agua y recogieron unos 30 metros cúbicos de líquido, según informó su portavoz, Delmiro Guntiñas.

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